“No tenía visto este tipo de paros. Es un paro frente a lo que va a ocurrir, porque la gran mayoría de las organizaciones sindicales que están convocándolo todavía no han anunciado sus negociaciones colectivas. Es un paro por lo menos extraño”, aseguró ayer el ministro de Trabajo Carlos Tomada. Sorprendido por esta modalidad de protesta, pidió que los protagonistas “recapaciten y se sienten con los empresarios para tratar de alcanzar un acuerdo”, al tiempo que destacó que “el Ministerio de Trabajo tiene las puertas abiertas para este diálogo como lo venimos haciendo desde hace 12 años”.

El 9 de junio es la fecha elegida por los 22 gremios de transporte, con la UTA de Roberto Fernández a la cabeza, y que acompañarán las centrales opositoras que lideran el camionero Hugo Moyano (CGT Azopardo), el gastronómico Luis Barrionuevo (CGT Celeste y Blanca) y el estatal Pablo Micheli (CTA). Como parte de esa pelea, el secretario adjunto del Sindicato de Camioneros, Pablo Moyano, calificó ayer de “ridículo” el aumento salarial de 27 por ciento acordado por los cinco gremios que firmaron ayer y vaticinó que “la gran mayoría” de los trabajadores va a apoyar el paro. “Después dicen que no hay techo salarial, acá estos muchachos le han puesto techo, ventana y puerta”, enfatizó Moyano. Otro de los que criticó los acuerdos de la UOM, Comercio, Uocra y UPCN fue el líder del cuerpo de delegados de la Unión Ferroviaria en el Ferrocarril Sarmiento, Rubén Sobrero. “Sus laburantes están pidiendo un poquito más de coraje y su única preocupación es chuparle las medias a cualquier presidente de turno.”