No todos son malos augurios para el Mercosur. Por lo menos, ayer las terminales automotrices de Argentina y Brasil anunciaron que llegaron a un entendimiento para coordinar sus políticas de producción en la región. El acuerdo fue firmado por la Asociación de Fábricas de Automotores y la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores de Brasil. En un comunicado, las empresas aclaran que “la industria automotriz del Mercosur desarrolla sus relaciones intrarregionales por acuerdo propio, firmado por los países del bloque –Política Automotriz del Mercosur–, que establece parámetros para sus actividades comerciales y industriales”. Según ese comunicado, las terminales “acordaron un programa de trabajo destinado a promover el desarrollo sustentable de la industria automotriz en ambos países” en base a las siguientes pautas: promover el crecimiento de los respectivos mercados internos; ampliar el número de acuerdos internacionales y expandir las exportaciones automotrices a países fuera de la región; aumentar la competitividad y la sustentabilidad de la cadena de valor, mejorar las condiciones que permitan nuevas inversiones en ambos países y trabajar para superar las dificultades en las relaciones bilaterales, entre otros compromisos.