La Corte Suprema de Justicia suspendió ayer cinco remates de viviendas que fueron compradas a través de créditos privados, aunque todavía sigue sin pronunciarse sobre la validez de la pesificación de esos préstamos. En su acuerdo, el alto tribunal hizo lugar a los recursos de queja planteados por los deudores, quienes objetan las normas de emergencia económica dictadas durante los gobiernos de Fernando de la Rúa y Eduardo Duhalde.

Si bien la Corte no se pronunció acerca de la constitucionalidad de la pesificación de los créditos privados, ordenó suspender las ejecuciones hipotecarias, una de ellas prevista para el 20 de marzo. Hasta ahora, la Corte viene suspendiendo la mayoría de los remates de viviendas únicas.