La Asamblea Constituyente de Ecuador prohibió la instalación y el uso de bases por países extranjeros en ese territorio. El artículo fue aprobado el lunes junto con otros cuatro correspondientes a la soberanía territorial. Con 89 votos a favor, de 105, la moción es un nuevo revés para Estados Unidos, que desde el 2000 opera la base ecuatoriana de Manta. El convenio vence en noviembre del 2009, pero el presidente de Ecuador, Rafael Correa, ya dijo que no lo renovará. Aun así, un sector de la Constituyente planteó un proyecto para dar por terminado el pacto de manera anticipada. Sin pausa, la Asamblea prosiguió ayer para debatir la ley petrolera y de racionalización del endeudamiento, propuesta por el oficialismo.

Lo que resultó inconcebible para algunos fue vivido con euforia y felicidad por la mayoría, cuando el quinto artículo promovido por el oficialismo se incorporó el lunes pasado a la nueva Carta Magna. Esta será llevada a referéndum en los próximos meses. “Es histórico lo que logramos, ha sido una lucha contra grandes presiones extranjeras”, dijo la asambleísta María Augusta Calle. Según el apartado en cuestión, Quito ya no tendrá bases extranjeras. “Ecuador es un territorio de paz”, dice el quinto artículo. “No se permite el establecimiento de bases militares extranjeras ni de instalaciones extranjeras con propósitos militares. No se pueden ceder bases militares nacionales a fuerzas armadas o de seguridad extranjeras”, reza.

Los primeros cuatro artículos se aprobaron sin rispideces, según informó el diario ecuatoriano El Comercio. El primero y el segundo garantizan la unidad territorial, el tercero reconoce la soberanía de los recursos naturales y el cuarto los derechos sobre la órbita geoestacionaria y los espacios marítimos. En cambio, el quinto artículo fue el más conflictivo.

En un principio, la oposición esgrimió que no debía constar en la Constitución. “No creemos que debamos poner un candado para futuros gobiernos. Eso corresponde que lo analice el Congreso”, dijo a Página/12 Fausto Lutera, el jefe de la bancada del opositor Partido Social Cristiano. Para el líder del PSP, que maneja 18 asientos de la Asamblea, Venezuela metió las narices en la Asamblea. “Acá existe una xenofobia a Estados Unidos y Correa recibe órdenes del presidente Hugo Chávez”, añadió.

Ante los esfuerzos en vano del PSP por excluir el artículo de la Asamblea, Cristina Reyes, del opositor Partido Social Cristiano, decidió presentar un texto alternativo. Este proponía que existiera la posibilidad para la instalación de bases extranjeras humanitarias. Lutera argumentó algo similar. “Hay un convenio internacional firmado por todos los países con la ONU. Si hay un desastre nacional o un golpe militar, podemos necesitar a los Cascos Azules”, sostuvo.

Sin embargo, el oficialismo no les creyó. “Los fines humanitarios son sólo una coartada. Eso cumple la base de Manta, aparentemente no cumple funciones bélicas, no tiene armas, pero sirve para el Plan Colombia, que no tiene un fin humanitario, sino guerrerista, del presidente colombiano Alvaro Uribe”, respondió Paco Velazco, de la lista Acuerdo País, que impulsa Correa. Velazco se refirió a la única base militar extranjera en Ecuador, situada en la ciudad costera de Manta, donde opera una unidad antidrogas de Washington.

Informe: Juan Manuel Barca.