A pedido del presidente Alvaro Uribe, la Cámara de Representantes de Colombia inició una investigación para determinar si la red de informantes civiles convocada por el gobierno viene operando con el apoyo de los paramilitares. Uribe tomó cartas en el asunto tras las denuncias sobre anomalías formuladas por la senadora Piedad Córdoba, quien alertó que “se está deteniendo a la gente sin autorización y las Convivir –cooperativas de seguridad privada– se ampararon en la red de informantes para amenazar”. A partir de esas denuncias, la Comisión de Acusaciones de la Cámara baja inició una investigación para determinar su veracidad.
“El presidente solicitó a la Cámara que se le investigue para tratar de clarificar cualquier situación en que pueda verse involucrado su gobierno”, dijo el parlamentario Telésforo Pedraza, quien tendrá a su cargo la investigación. Según Pedraza, la célula legislativa designó a los tres miembros de la Cámara que realizarán la investigación y se espera que en las próximas semanas emitan un primer informe.
Por su parte, el comandante del ejército colombiano, general Carlos Ospina, salió en defensa de la red de informantes y desestimó que las denuncias presentadas en contra de esa iniciativa minen el respaldo de la ciudadanía a las autoridades. “Creo que va a hacer una investigación muy grande, porque son como 20 millones de personas que en Colombia no quieren ser atacadas ni asaltadas”, señaló el oficial.
Uribe, quien el pasado 7 de agosto asumió el poder, puso en marcha un plan de seguridad que prevé la conformación de una fuerza de soldados y policías de apoyo y de una red de un millón de informantes, así como el reclutamiento de soldados campesinos. Al amparo del estado de conmoción interna, el presidente Uribe anunció el pasado 21 de setiembre la creación de las primeras dos zonas de rehabilitación y designó a los comandantes militares que tendrán a su cargo la preservación del orden público en esas regiones.