Unos 400 estudiantes paquistaníes, que viajaban ayer en una zona tribal cercana a Afganistán, fueron secuestrados por talibán. Los estudiantes, que regresaban de una escuela situada en la región de Waziristán norte, fronteriza con Afganistán, se dirigían a la ciudad de Bannu en una caravana de más de 30 autobuses.

El audaz golpe coincidió con un creciente número de acciones violentas en áreas tribales del noroeste de Pakistán próximas al límite con Afganistán, que el gobierno atribuye al propósito de los rebeldes de distraer la atención del ejército del operativo contra talibán en curso hace más de un mes en el cercano valle de Swat.

El secuestro masivo de los estudiantes y docentes ocurrió a unos 30 kilómetros del Colegio de Cadetes Razmak en la zona tribal de Waziristán norte, dijo el jefe de la policía de Bannu, Iqbal Marwat. “Sólo dos vehículos con unos 25 estudiantes a bordo llegaron a Bannu”, dijo Marwat, añadiendo que 28 autobuses en los que viajaban alrededor de 400 estudiantes estaban con paradero desconocido. La gente abandonaba el colegio luego de haber sido urgida a hacerlo a través de una llamada telefónica de un hombre que al parecer era un político local.

Alrededor de 30 colectivos, autos y otros móviles en los que se trasladaban alumnos, maestros y parientes fueron frenados en la ruta por un gran número de presuntos milicianos islamistas en sus propios vehículos, agregó el policía. Un empleado del colegio que evitó el secuestro dijo que los asaltantes llevaban cohetes, fusiles, granadas de mano y otras armas. Los colegios de cadetes de Pakistán son especies de liceos con comida y cama para estudiantes adolescentes y por lo general están administrados por militares retirados.

Waziristán norte es un bastión talibán cerca de la frontera afgana ubicado no lejos del valle de Swat. En Waziristán sur tiene su centro de poder el líder de los talibán de Pakistán, Baitullah Mehsud, quien amenazó con vengar la ofensiva de Swat con ataques en otros distritos.