Desde Santiago

El candidato de la derecha, Sebastián Piñera, decidió terminar su propaganda política con un masivo show artístico en pleno centro de esta capital. Sacando lustre a una fama de “populista” que de a poco ha ido ganando terreno, el multimillonario inversionista reunió anoche a unas 30 mil personas en el cruce de la Alameda con la avenida Portugal. Una cifra importante de adherentes, qué duda cabe. Sin embargo, muchas de esas personas poco querían saber de política y fueron más por presenciar el espectáculo que dieron el cantante Américo y la banda Los Charros, de la Comuna de Lumaco, ambos estrellas populares de la cumbia. Con un discurso similar a los que ha venido repitiendo, y con menos gente de la que se esperaba, Piñera llamó a la clase media, dueñas de casa y a los discapacitados a tener confianza en su gobierno. “Faltan sólo tres días para decidir por el progreso, para que el empleo avance y la delincuencia retroceda”, dijo.

Apeló también al populismo al prometer que creará un millón de empleos, pero sin explicar cómo lo haría. “Quiero pedirles a todos que nos den una oportunidad para mejorar este país”, concluyó.

El comando de Piñera diseñó además un peculiar estilo de acarreo de simpatizantes. Repartió miles de pasajes gratis para utilizar en el metro de Santiago y así asegurar el éxito de su convocatoria.

Con menos parafernalia, el postulante del Juntos Podemos-Frente Amplio, Jorge Arrate, que aglutina a la izquierda extraparlamentaria, cerró oficialmente su propaganda con un recorrido por la céntrica calle Ahumada acompañado de artistas de todas las tendencias, batucadas y mucho colorido. Su discurso final lo dio en la Plaza de Armas de Santiago.

Eduardo Frei Ruiz-Tagle, el candidato de la Concertación, que figura segundo en las encuestas, decidió concluir su campaña en la ciudad de Concepción, al sur de Santiago.

En tanto, el independiente Marco Enríquez-Ominami dio por finalizada su propaganda electoral en La Calera, la pequeña ciudad cercana a Valparaíso y que a comienzos de año sirvió de trampolín para lanzar su carrera presidencial.