Turquía denunció que había 30 balas en los nueve cuerpos recuperados de los activistas fallecidos durante el ataque israelí contra la flotilla humanitaria de mayo pasado. Lo dijo el ministro turco de Asuntos Europeos, Egemen Bagis, durante un foro titulado “Turquía en Europa”, que se celebró en Estambul. Según el funcionario, las autopsias refuerzan la hipótesis de un presunto abuso de la fuerza, que defiende Ankara y por lo que demanda una disculpa pública de Tel Aviv. El primer ministro israelí Benjamín Netanyahu ya había respondido a los insistentes pedidos turcos. “Israel no puede disculparse porque sus soldados fueran atacados por una turba que casi los mata. Dicho esto, lamentamos la pérdida de vidas humanas”, había asegurado.