EL MUNDO › LA SEGUNDA VUELTA EN BRASIL SE REALIZARá EN MENOS DE DOS SEMANAS
La candidata oficialista repuntó, según una última encuesta. Su rival socialdemócrata no descartó llevar a la Justicia al titular de Vox Populi. La campaña antiaborto no surte efecto.
La candidata oficialista para la presidencia brasileña, Dilma Rousseff, le sacaría más de doce puntos al opositor José Serra en la segunda vuelta, reveló una encuesta. El Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) criticó el sondeo y no descartó llevar a la Justicia al titular de la encuestadora.
Según el estudio del Instituto Vox Populi, la delfín del presidente Luiz Inácio Lula da Silva tendría un 51 por ciento de intención de voto frente al 39 por ciento que cosecharía el candidato derechista. Con respecto a la anterior encuesta, del 13 de octubre, hecha por la misma entidad, la representante del oficialista Partido de los Trabajadores (PT) avanzó tres puntos mientras que el ex gobernador de San Pablo retrocedió uno.
Según estos resultados, no habrían impactado negativamente las noticias por casos de corrupción que salpicaron el entorno de Rousseff. Tampoco se habría visto manchada por las acusaciones de un posible apoyo a una ley para despenalizar el aborto. Por ese motivo, algunos obispos habían llamado a votar contra la ex jefa de Gabinete de Lula. Para evitar esa dispersión de votos, el PT comenzó a dialogar con los sectores religiosos y Rousseff se comprometió a mantener la actual legislación, que pena a las mujeres que interrumpen su embarazo. El lunes, en una entrevista con TV Globo, la candidata de Lula dijo que no modificará las normas, pero que no mandará a apresar a las mujeres que se practiquen un aborto.
La encuesta de Vox Populi fue como un baldazo de agua fría para el PSDB. El presidente de esa agrupación, Sergio Guerra, puso en tela de juicio la información. El socialdemócrata dijo que la encuestadora era afín al gobierno de Lula y que, por eso, estaría divulgando cifras falsas para crear un clima de opinión que favorezca a Rousseff. “Es una acción irresponsable y ligera de una institución que no tiene neutralidad. No podemos aceptar callados que una institución como ésta, que trabaja para el gobierno, que hace la campaña del gobierno, del PT, actúe impunemente”, protestó Guerra.
El político opositor recordó que Vox Populi había errado en las encuestas que daban a Rousseff como ganadora en la primera vuelta. La petista no alcanzó el 50 por ciento necesario y por eso tiene que volver a medirse el próximo domingo 31 con Serra. El senador Guerra no descartó entablar una demanda judicial contra la entidad responsable del sondeo. “No es Marcos Coimbra (presidente de Vox Populi) el que va a elegir al presidente de la república, él no es el pueblo”, disparó.
La semana pasada, las encuestas de Datafolha y de Ibope mostraban un repunte de Serra, situándolo a sólo seis puntos de la economista. Mientras que Sensus daba un empate técnico entre el socialdemócrata y la candidata del PT. Serra pidió que los votantes prestaran atención a su competidora. “Lula es Lula. Dilma es Dilma y la verdad es que Dilma no está en condiciones de gobernar”, dijo el opositor en una publicidad electoral que se transmitió en cadena nacional a todo Brasil. Ayer apareció por primera vez el ex presidente Fernando Henrique Cardoso en una presentación de campaña de Serra. El ex mandatario participó de un acto en el que algunos integrantes del Partido Verde (PV) paulista le dieron su apoyo al socialdemócrata.
Mientras tanto, un fiscal anunció ayer que había denunciado al tesorero del PT, Joao Vaccari Neto, por los supuestos delitos de asociación ilícita y lavado de dinero, en el marco de una investigación por una estafa en una cooperativa de viviendas en San Pablo, según informó la agencia ANSA.
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