La Cámara baja de Wisconsin aprobó ayer por 53 votos a 42 un polémico proyecto de ley impulsado por el Partido Republicano, que elimina los derechos de negociación colectiva de los empleados públicos para combatir el déficit por el que atraviesa el estado.

Después de tres semanas de bloqueo legislativo y furiosas protestas alrededor del edificio del capitolio en Madison, la mayoría republicana en el Senado estatal había aprobado la ley pese a la ausencia de sus colegas demócratas. El sorpresivo y cuestionado giro de los acontecimientos allanó el camino para que la Cámara baja de Wisconsin sometiera ayer a una votación final la controvertida norma, que priva a los trabajadores públicos de casi todos sus derechos de negociación sindical.

De esta manera, los empleados estatales de Wisconsin verán afectados la mayoría de sus derechos de negociación sindical, al tiempo que sufrirán aumentos en los seguros de salud y de pensión, entre otras medidas.

Antes de la votación, unos siete mil empleados públicos, familiares y activistas desbordaron la Legislatura para protestar la aprobación de la ley en el Senado estatal, tras tres semanas de manifestaciones similares contra la norma, que el gobernador había combinado con un recorte presupuestario de 137 millones de dólares. Las fuerzas de seguridad impidieron su ingreso, mientras otro grupo dentro de la Legislatura les gritaba a los funcionarios republicanos que se movilizaban por los pasillos rodeados de personal policial.

El tratamiento de la ley se había suspendido luego de que los 14 senadores demócratas de la Legislatura huyeran al vecino Illinois hace tres semanas para evitar dar quórum y que se votara la ley. El Senado de Wisconsin requiere la presencia de 20 legisladores para aprobar cualquier medida relacionada con el presupuesto.

Defendida por el recientemente electo gobernador republicano de Wisconsin, Scott Walker, la nueva ley ya alentó a otros estados, incluyendo Ohio e Indiana, a tomar medidas similares para reducir el poder de los sindicatos del sector público con el objetivo de bajar los costos de los sueldos.

El gobernador “aplaudió a todos los miembros de la asamblea por presentarse a debatir la legislación y participar en democracia”, dijo a través de una declaración reproducida por un diario local. “Sus acciones salvarán puestos de trabajo, protegerán a los contribuyentes, reformarán el gobierno y ayudarán a balancear el presupuesto”, afirmó el gobernador.

Con las encuestas mostrando que la mayoría de los estadounidenses no está lista para ver una mutilación del poder sindical, los demócratas en el estado y a nivel nacional esperan que los hechos en Wisconsin terminen por dañar a los republicanos. “En 30 minutos, 18 senadores de estado deshicieron 50 años de derechos civiles en Wisconsin”, dijo Mark Miller, el líder de los demócratas en el Senado. “La falta de respeto por la gente de Wisconsin y sus derechos es una afrenta que nunca se olvidará.”

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.

Traducción: C.D.