Desde Lima

Cuatro días después de su elección como presidente del Perú, Ollanta Humala inició hoy una gira que lo llevará a todos los países de América del Sur y que comienza por Brasil. El martes estará en Argentina, donde se reunirá con la presidenta Cristina Kirchner. Antes de iniciar su viaje, se reunió con los principales directivos de las cámaras empresarias. También recibió la visita de la plana mayor del gobernante partido aprista, con el cual ha tenido una relación áspera, y con la alcaldesa de Lima, la izquierdista Susana Villarán, que asumió el cargo en enero. Los triunfos electorales de Villarán y Humala han sido considerados como un renacimiento de la izquierda peruana.

La elección de Brasil como primer destino de su gira al exterior refleja la prioridad que Humala le da a su relación con este país. Durante la campaña electoral, el presidente electo reiteró sus simpatías con el gobierno de Brasil, al que puso como un modelo exitoso en la región. Humala ha resaltado sus coincidencias con el ex presidente Lula y con el Partido de los Trabajadores (PT). “Brasil será un socio importante, pero nuestra política será de integración con todos los países de la región”, le dijo a Página/12 Alberto Adrianzén, asesor de Humala y responsable de los temas de política exterior en el plan de gobierno del presidente electo.

Humala se reunirá con la presidenta Dilma Rousseff el jueves y el viernes viajará a San Pablo para encontrarse con Lula. El sábado volará a Asunción para conversar con el presidente Fernando Lugo y de ahí volverá a Brasil. El lunes estará en Uruguay para una reunión con José Mujica y el martes llegará a Buenos Aires donde será recibido por la presidenta Cristina Kirchner. Después de pasar por Santiago el miércoles para hablar con Sebastián Piñera, Humala retornará a Lima por unos días y luego emprenderá la segunda etapa de su gira regional yendo a Ecuador, Colombia, Venezuela y Bolivia. Luego de esta gira sudamericana, Humala viajaría a Estados Unidos antes de asumir el 28 de julio. “El viaje a Estados Unidos no está definido, pero es muy probable”, nos reveló Adrianzén.

El encuentro entre el presidente electo y los jerarcas del empresariado se produjo en momentos que desde los sectores empresariales y sus representantes políticos y mediáticos se presiona al presidente electo para que acelere el nombramiento de su gabinete y designe a un ministro de Economía que asegure la continuidad del actual modelo económico. Las presiones comenzaron desde el mismo domingo, cuando las primeras proyecciones extraoficiales daban como ganador a Humala. El lunes la Bolsa de Lima se desplomó –el martes comenzó a recuperarse– en una movida interpretada como una operación para torcerle el brazo al presidente electo y lograr el nombramiento en las carteras clave del manejo económico de personas cercanas a los intereses empresariales. Humala no cedió a la presión y ha respondido que se tomará su tiempo para nombrar a sus ministros, pero envió un mensaje tranquilizador a los empresarios: ha dicho que respetará el modelo económico y promoverá las inversiones privadas. En entrevista que le dio a Página/12, se declaró partidario de una economía abierta de mercado y aseguró que los cambios que hará en la política económica estarán orientados a mejorar los programas sociales. Ese mismo mensaje fue el que les dio a los empresarios en el encuentro privado que tuvo ayer con ellos.

A la salida de su reunión con Humala, Humberto Speziani, presidente de la Confederación de Instituciones Empresariales del Perú (Confiep), el principal gremio empresarial, dijo que sus dudas se habían despejado y que los empresarios esperaban colaborar con el nuevo gobierno. “No vamos a entrar en una confrontación con el gobierno. Tenemos que trabajar con el gobierno, no podemos trabajar contra el gobierno. Tenemos que seguir creciendo. Hemos aclarado las dudas que teníamos”, declaró Speziani, inmediatamente después de su conversación, de unos 30 minutos, con el presidente electo. En la campaña los empresarios se habían jugado por la candidatura de Keiko Fujimori, la hija del ex dictador Alberto Fujimori.

La recuperación de la Bolsa, la declaraciones de su equipo económico y del propio Humala asegurando que no se cambiarán los fundamentos del modelo económico y la reunión con los empresarios han tranquilizado en algo el frente empresarial, pero ése es un flanco conflictivo con el cual el nuevo presidente seguramente se enfrentará cuando comience a tomar medidas como el anunciado incremento de impuestos a las empresas mineras. El equipo de Humala comenzó a elaborar el plan de acción para los primeros cien días de su gobierno, que incluye la rápida implementación de las políticas sociales ofrecidas durante la campaña.