Desde Santiago

Si bien la semana pasada perdió la presidencia de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fech) –una de las columnas vertebrales del movimiento estudiantil chileno–, su figura sigue siendo reconocida como una de las gestoras de que la problemática educacional se instalara en el debate nacional. Logró además que la situación escolar fuera reconocida transversalmente como un sistema agotado, fallido. Herencia de la dictadura de Pinochet. Hablamos de Camila Vallejo, la estudiante de geografía y militante comunista que logró aglutinar masas y que alentó a la hasta hace poco apática y despolitizada juventud chilena a salir a las calles a expresar el descontento social. Su imagen dio la vuelta al mundo, y todavía sigue concitando el interés de los medios.

Ayer, un sondeo de la consultora Imaginacción, Radio Cooperativa y la Universidad Técnica Federico Santa María, determinó que un 35,3 por ciento de los encuestados eligió a Camila Vallejo como el personaje del año en Chile. La líder estudiantil fue la más nombrada como la figura más relevante de 2011, seguida muy de lejos por el presidente de derecha Sebastián Piñera, que recibió el 20,4 por ciento de las menciones; del poeta Nicanor Parra, el último ganador del Premio Cervantes (14,8), y de Alexis Sánchez, el jugador chileno de fútbol de moda en el mundo (14,7). Atacada, admirada, abucheada y piropeada. Así ha sido la tónica de las apariciones públicas de Vallejo, desde que a mediados de año se luciera en programas televisivos de corte político y comenzara a hacerse conocida. También se destacó en sus participaciones en el propio Congreso Nacional a la hora de ir a defender la calidad y gratuidad de la educación o al enfrentar a públicos de hasta 500 mil personas en algunas de las marchas llevadas adelante este año.

En una de sus últimas entrevistas, Camila Vallejo, que seguirá ligada al movimiento desde su cargo de vicepresidente de la Fech, se dio tiempo para hablar distendidamente del mundo político. Dijo, por ejemplo, que al ministro de Educación, Felipe Bulnes, le regalaría una botella de alcohol para que “lo ablande como persona y políticamente, el corazón, la cabeza, y que entienda que esto no es una guerra contra el gobierno”. Respecto de Piñera, la dirigente estudiantil le ofreció como presente “un curso de marketing o una asesoría comunicacional”. Junto a ello, reiteró su crítica hacia el Parlamento por la aprobación del Presupuesto de Educación, cuyo monto de unos 12 mil millones de dólares no satisfizo a los dirigentes. “¿Por qué no tuvimos el 80 por ciento (de los votos) en el Parlamento, si el 80 por ciento de la población señala una cosa? Entonces, nosotros creemos que el movimiento tiene que disputar esos espacios a través de sus representantes”, sostuvo. Esto en un escenario donde los universitarios han vuelto a las urnas internas en sus planteles y que, de traspasarse eso al mundo político, podría modificar cualquier escenario o proyección en las próximas municipales de 2012 y presidenciales de 2014.

Adicionalmente, el sondeo reveló que el 46,6 por ciento estimó que el principal tema del año fue la educación, mientras que el 25,3 por ciento citó a la delincuencia y el 20,8 por ciento nombró a los movimientos sociales. Respecto de la educación, un 66,2 por ciento de los encuestados está de acuerdo con la eliminación del sistema municipalizado, mientras que un 81,9 por ciento de los encuestados cree necesaria la eliminación del lucro en la educación y el 60,3 por ciento está de acuerdo con que la educación sea gratuita para todos. En el área económica, el 37,1 por ciento considera que el gobierno maneja bien los temas económicos en el país, lo que representa una disminución de 42 puntos porcentuales respecto de la evaluación de septiembre. Mientras que un 80,4 por ciento de los consultados no se sienten protegidos frente a eventuales abusos que puedan cometer las grandes empresas, las instituciones de crédito y los emisores de tarjetas del comercio.