Sucede que algunos presidentes latinoamericanos de línea progresista han tocado sistemas de alianzas que parecían inmaculados y blindados ante las crisis devastadoras, En su contraofensiva, los medios del establishment encuentran un recurso que ya marca tendencia: la voz de los hermanos de líderes de la región, transformados en críticos duros con acceso directo a los titulares. El hermano de Fernando Lugo, Pompeyo Lugo, milita en el Partido Colorado, opositor del gobernante paraguayo. Una vez Pompeyo dijo que prefería votar a la cantante Lady Gaga que a su consanguíneo. No le va mejor a Rafael Correa. Su hermano mayor, el empresario Fabricio Correa, creó la agrupación política Equipo y no descarta presentarse a las elecciones presidenciales de 2013. Un caso distinto es el que le toca al mandatario peruano Ollanta Humala: su radicalizado hermano Antauro lo acusa de ceder a la derecha y desde prisión le reclama un indulto. Sin embargo, en el último tiempo los medios opositores dejaron de usar la figura de Antauro para pegarle a Ollanta, algo que no parece casual desde que el presidente peruano rompiera con la base más izquierdista de su gobierno.

Fernando Lugo es menor que Mercedes y Pompeyo. Los Lugo no son lo que se dice una sagrada familia. Mirta Maidana Lugo, sobrina del presidente paraguayo e hija de Mercedes, contó en diálogo con Página/12 que a Fernando le desconfían. “A veces hay rencillas. Se cuestiona que a la familia no se le dé el lugar de familia presidencial. Fernando está acostumbrado a la vida eclesial, que lo llevó a estar un tiempo solo. A mi tío le falta más vida hogareña”, dijo la ex candidata a diputada por el Partido Colorado. Y es que el ex obispo de los pobres es la excepción en un clan teñido por ese color político. “Somos una familia de raíces coloradas. Tenemos como gran caudillo colorado a Epifanio Méndez Fleitas, tío de Fernando”, dijo orgullosa del otro lado de la línea telefónica.

Pompeyo Lugo sigue entonces los pasos del caudillo. La política lo distancia del camino recorrido por Fernando, quien llegó a la presidencia en 2008 con una alianza entre movimientos sociales y el Partido Liberal. Según la sobrina, los hermanos “no son confidentes, tienen una relación distante, pero están en contacto”. Se le recordó a Mirta Maidana que Pompeyo dijo que preferiría votar a Lady Gaga antes de optar por la reelección de Fernando Lugo (junio de 2011, Ultima Hora). “Pompeyo es muy irónico. Siempre con un doble discurso. A veces habla así para llamar la atención, pero a él lo beneficia tener a Fernando en el poder”, dijo Mirta. Esa portación de apellido hizo que los medios paraguayos le prestaran atención. Físicamente, Pompeyo algo se parece a Fernando. Y en cuanto a la personalidad, uno es hogareño y le gusta ir a las peñas, el otro –como dijo su pariente– es más solitario. “Pompeyo es un hombre de mundo, Vivió en Rusia, en Suecia. Volvió cuando cayó la dictadura de Stroessner. Cocina, se reúne con la familia.” Pompeyo, fiel a la ideología de sus parientes, creó la agrupación Alianza Nacional de Resistencia Colorada, que presentará candidato por Asunción en las municipales de julio.

Hay algo común en los hermanos mayores: suelen dar cátedra a los menores. Eso le sucede a Fabricio con Rafael Correa. Dice que su hermano equivoca el rumbo. “Pienso que Rafael se está desviando del camino recto, de la senda democrática.” Los hermanos estuvieron unidos para la campaña que llevó al economista al Palacio Carondelet en 2006. Pero pronto se pelearían. El gobierno dio la orden de no permitir que el empresario suscribiera contratos con el Estado. Esto, habida cuenta de que se lo acusó a Fabricio de haberse beneficiado de millonarios contratos bajo la gestión de su hermano. El mandatario fue categórico con el asunto: “Fabricio es un hábil y ambicioso de poder y dinero”. A la vez acusó a los autores del libro El gran hermano de no tener pruebas para ensuciar a su gobierno. “Yo nunca conocí un contrato de mi hermano Fabricio” (octubre de 2011, Ecuador TV). El parecido físico entre ambos es innegable, tan innegable como el abismo que se abrió entre sus idearios políticos.

El empresario Fabricio creó el movimiento político opositor Equipo (Equipo, Progreso y Orden) de ideología socialcristiana. Suele hablar de sí mismo en tercera persona. “Si es que en el 2013 se requiere que Fabricio Correa sea una alternativa para la presidencia, tenga la más absoluta certeza de que voy a aceptar.” Parece una tarea ardua: Rafael Correa es uno de los mandatarios con más alta popularidad en la región.

Si con los Lugo y los Correa se da una pelea en la arena política, en el caso de los hermanos Humala, ambos militares, la rivalidad se instaló sobre todo a partir de un hecho: el levantamiento de reservistas del ejército que organizó Antauro Humala el 1º de enero de 2005 contra el entonces presidente Alejandro Toledo. La asonada en una comisaría de Andahuaylas duró cuatro días. Hubo cuatro policías y dos reservistas muertos. Antauro se rindió y fue encarcelado. Desde entonces está preso, condenado a 19 años. En un inicio Ollanta apoyó a Antauro, pero luego de producidas las muertes de los policías se apartó. Antauro es etnocacerista –una doctrina que reivindica la supremacía de la raza cobriza–, se vanagloria de ser un radical y alguna vez dijo ser admirador de Robespierre. Desde que Ollanta asumió la presidencia, en julio del año pasado, lo acusa de haber cedido a la derecha y traicionado al “nacionalismo”. El afecto fraterno volvería si Ollanta le otorgara un indulto. Por ahora, no está en la agenda del gobierno peruano. Algunos presidentes eligen mantener una sana distancia de sus hermanos.