Barack Obama firmó un decreto reforzando nuevamente las sanciones contra Irán por su programa nuclear, en particular, bloqueando “todo bien o participación en activos del gobierno iraní” en Estados Unidos, según anunció ayer la Casa Blanca. Este decreto afecta principalmente al sector financiero iraní, incluido el Banco Central y “toda institución financiera” en el país persa y hace entrar en vigor sanciones ya previstas en la Ley de Financiación del Pentágono que Obama había promulgado el 31 de diciembre. “Decidí que las medidas adicionales se justifican, particularmente a la luz de las prácticas fraudulentas del Banco Central de Irán y otros bancos iraníes para ocultar las transacciones de las partes sancionadas”, escribió Obama en un mensaje al Congreso.