EL MUNDO
Un aliado menos
El gobierno de la presidenta Dilma Rousseff sufrió una baja entre sus aliados cuando el Partido de la República, de centroderecha, decidió pasar ayer a la oposición al no poder controlar el Ministerio de Transporte, que el año pasado fue eje de un escándalo de corrupción y sobreprecios. Blairo Maggi, senador, ex gobernador de Mato Grosso considerado “rey de la soja” en Brasil y jefe del bloque del PR en la Cámara alta, hizo el anuncio por no haber recibido la luz verde de Rousseff para que esa fuerza reasuma el Ministerio de Transporte. El PR cuenta con siete de los 81 senadores. “Me cansé, no quiero negociar más porque las cosas no avanzan, entonces estamos afuera de la discusión para el gabinete de ministros y eso significa que estamos en la oposición”, afirmó Maggi.