El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, manifestó ayer la necesidad de una reforma profunda de la Constitución, vigente desde 1985, tras décadas de regímenes militares. Lo anunció en una sesión del Congreso con motivo del 27 aniversario de la vigencia de la Carta Magna. El mandatario consideró que es inaceptable no hacer los cambios del texto constitucional porque significa hipotecar el desa-rrollo de Guatemala. Entre las reformas que plantea Pérez Molina figura el fortalecimiento de las instituciones de Seguridad y Justicia para reducir la tasa de homicidios y la impunidad de los delitos contra la vida. El fortalecimiento de mecanismos de transparencia para reducir los graves índices de corrupción y de la normativa política y electoral para mejorar el sistema político, son otras medidas consideradas por el mandatario.