El gobierno de Colombia no cede en su política de mano dura. Pese a la muerte el lunes, y durante una operación de rescate, de un ex ministro de Defensa y un ex gobernador de Antioquia que estaban desde tiempo secuestrados por la guerrilla, y de las polémicas que suscitó entre los familiares de las víctimas contra el empleo de este tipo de tácticas, el vicepresidente Francisco Santos aseguró, en charla telefónica con este diario, que “si se dan las condiciones, el gobierno no dudaría en autorizar otra operación de rescate”.
–¿Cómo afecta la política del presidente Alvaro Uribe el que Colombia esté dividida entre los que buscan un acuerdo humanitario para la libertad de los secuestrados por la guerrilla y los que prefieren la vía de la fuerza?
–Colombia no está dividida en ese sentido. Hay posiciones en las cuales la mayoritaria es que haya un acuerdo humanitario en las condiciones en que el gobierno ha planteado. Nada de lo ocurrido afecta la Política de Seguridad Democrática, y eso no tiene vuelta atrás.
–Pero lo que sucedió hace pensar que esa política de mano firme no está funcionando.
–No. ¿Por qué? Al contrario. ¿Usted no cree que llegarles a las FARC a semejante guarida, en semejante sitio, no es un éxito? Puede, sí, que hubiera podido salir mejor, pero si hay un resultado concreto de esto es que las FARC, que tenían la posibilidad de tener a un señor cinco años y diez meses escondido en el monte, ya saben que el gobierno colombiano les puede llegar allá. Eso es un avance significativo muy importante. Eso demuestra que la Política de Seguridad está funcionando así haya habido un revés.
–¿Eso quiere decir que el gobierno podría intentar otro rescate de los secuestrados por la guerrilla?
–Claro que sí, sin ninguna duda. A este gobierno no le tiembla el pulso y es respetuoso con nuestro deber de proteger la vida de los secuestrados. El gobierno tiene la obligación legal y constitucional de devolverles la libertad a los colombianos que están privados de ella por medio de estos mecanismos ilegales.
–¿Cuál es la posición de EE.UU. respecto de los ciudadanos de ese país que están secuestrados por la guerrilla?
–Que se rescate. Y le cuento que ayer muchos de los familiares de los secuestrados políticos, de los diputados del (departamento) Valle quisieron firmar una petición y ayer iban más de 4 mil formas donde decían “queremos rescate”.
–Se dice que el operativo de rescate fracasó porque los hombres que lo intentaron no están especializados en este tipo de operaciones y porque se usaron helicópteros que alertaron a los guerrilleros.
–Se buscó hacer el operativo de la manera más segura para proteger la vida de los secuestrados. Pero cuando usted se enfrenta a un grupo que decide en cualquier momento asesinar a los secuestrados de la manera en que los asesinó es bien difícil tener éxito. Le cuento que van a entrar recursos técnicos nuevos y gente preparada para penetrar en el monte largo tiempo y en mucho sigilo y de noche. Esa capacidad no la tenemos, pero en tres o cuatro meses llegará. En ese momento vamos a poder hacer operaciones de rescate con una capacidad nueva.
–¿Cómo va a manejar el gobierno las presiones de los familiares de los secuestrados para que se agilice la negociación del intercambio?
–El gobierno puso unas condiciones muy claras y concretas para llevar a cabo un acuerdo. Y ese acuerdo tiene que cumplir esas condiciones.

De El País de Madrid. Especial para Página/12.