Fidel Castro advirtió que las masivas manifestaciones en La Habana del día anterior contra las sanciones europeas representaban “sólo el inicio” de su respuesta. El gobierno cubano no tardó en hacerle llegar a la embajada española una “nota verbal” en la que “denuncia” el acta en la que ambos países acordaron el establecimiento del Centro Cultural de España en la capital cubana, lo que pone fin a la gestión española de esta institución. Las autoridades de la isla consideran responsables de la decisión de la UE a los gobiernos de España e Italia. Castro encabezó anteayer una manifestación que terminó en la embajada española y su hermano Raúl lideró otra marcha ante la sede diplomática de Italia. En tanto Italia pidió ayer que los cancilleres del bloque debatan el lunes y martes el estado de las relaciones con Cuba, tras las críticas de Castro a las medidas europeas que restringen la relación diplomática con la isla.