Los colegios electorales italianos abrieron ayer sus puertas para renovar las administraciones de 564 municipios, entre ellos el de Roma, en la primera gran cita electoral tras la formación del gobierno de unidad nacional de Enrico Letta. Los centros de voto permanecerán hoy hasta las 15.00 locales (13.00 GMT).

Unos siete millones de electores italianos están llamados a las urnas en los comicios que se celebran después de que los resultados de las elecciones generales del 24 y 25 de febrero no permitieran formar un gobierno debido al complicado sistema electoral y a la fragmentación del voto. Las municipales son, en efecto, una nueva prueba para comprobar si se repiten algunos fenómenos que se produjeron en las pasadas elecciones como el auge del Movimiento 5 Estrellas (M5S) del cómico Beppe Grillo, la pérdida de los votos del Partido Demócrata (PD) y el resurgimiento del Pueblo de la Libertad (PDL) de Silvio Berlusconi. El PD, de centro izquierda, y el conservador PDL son aliados en la actual coalición de gobierno que lidera el primer ministro Letta, pero se enfrentan en los comicios locales.

Todos los ojos están puestos en Roma, donde 19 candidatos aspiran a ser alcaldes de la capital italiana. El candidato del PD (el partido de Letta), Ignazio Marino, intentará arrebatar la ciudad al alcalde saliente, Gianni Alemanno, ex neofascista perteneciente al PDL. Aunque lo más probable es que se necesite una segunda ronda si ninguno de los candidatos alcanza el 50 por ciento de los votos, ya que tanto Ignazio Marino (PD), Marcello De Vito (M5S) y el independiente Alfio Marchini podrían conseguir un importante porcentaje de votos.

Por otro lado, el voto en Siena (centro) también acapara la atención sobre todo, después del escándalo financiero del banco Monte Paschi Siena, cuyo máximo accionista es una fundación controlada por el Ayuntamiento, históricamente en manos de la izquierda. La prensa italiana publicó en enero pasado que operaciones de derivación firmadas en 2009 por el anterior director del banco, Giuseppe Mussari, con el banco japonés Nomura habían acarreado al banco de Siena pérdidas superiores a 220 millones de euros. El candidato del centroizquierda es Bruno Valentini, pero el cirujano Eugenio Neri, apoyado por una amplia coalición de centroderecha, podría arrebatarle el Ayuntamiento tras los últimos escándalos.

Hasta las 19.00 de la tarde local (17.00 GMT) sólo el 36,3 por ciento de los aproximadamente siete millones de italianos llamados a las urnas había depositado su voto, informó el ministro del Interior, frente al 45,2 por ciento registrado en el mismo momento de los comicios anteriores. En Roma, la participación fue incluso menor, del 29,8 por ciento, frente al 43,6 por ciento de las pasadas municipales.

En caso de que ninguno de los candidatos obtenga la mayoría en la primera vuelta, la segunda vuelta se llevará a cabo el 9 y 10 de junio en las ciudades con más de 15.000 habitantes.