Las dos integrantes de la banda punk rusa Pussy Riot fueron liberadas ayer. Las artistas de Desmadre Vaginal habían sido condenadas a dos años de prisión, en agosto de 2012, cuando fueron acusadas por escenificar una plegaria punk contra Vladimir Putin en el principal templo ortodoxo ruso. La excarcelación de Maria Aliojina y Nadezhda Tolokonnikova tuvo lugar unos días después de que el presidente ruso anunciara una amnistía que benefició finalmente a 25 mil presos, entre ellos centenares de opositores y al ex magnate del petróleo Mijail Khodorkovski, además de los activistas de Greenpeace.

Luego de traspasar el portón de la cárcel en la ciudad siberiana de Krasnoyarsk, Tolokonnikova gritó “Viva Rusia sin Putin”, pocas horas después de que su compañera en la banda, Maria Aliojina, abandonara otra prisión en Nizhni Novgorod, informó la cadena de noticias Russia Today. Aliojina, Nadezhda y Ekaterina Samutsevich celebraron en 2012, junto con otras dos miembros de Pussy Riot, una misa punk-rock en la catedral de San Pablo, de Moscú, en la que pedían a la “Madre de Dios” que expulsara del poder al entonces primer ministro y actual presidente.

La actuación provocó una fuerte indignación entre los creyentes ortodoxos y las tres activistas fueron condenadas a dos años de prisión en agosto de 2011, por el delito de vandalismo relacionado con odio religioso. La pena de Samutsevich fue conmutada en octubre de ese mismo año por libertad condicional. En mayo de 2013, el Tribunal Municipal de Moscú rechazó el recurso de las otras dos y confirmó la condena.

En declaraciones tras ser liberada, Aliojina no dudó en descalificar la amnistía y de poner en duda que se trate de un acto humanitario, según declaraciones realizadas a la cadena rusa Dozhd. “Creo que es una artimaña de relaciones públicas por parte de Putin en vísperas de los Juegos Olímpicos de Sochi”, dijo la mujer, y aseguró que su actitud hacia el presidente no ha cambiado.

Por otra parte, la artista manifestó también que si pudiese habría rechazado la amnistía, en solidaridad con aquellas personas que siguen encarceladas. Y adelantó que trabajará a partir de ahora en la defensa de los derechos de los presos. El caso de la condena a las integrantes del colectivo punk-rock generó fuertes protestas internacionales y numerosas personalidades de la cultura y el espectáculo, entre ellas el ex Beatle Paul McCartney, Yoko Ono, Madonna y Lady Gaga, expresaron su solidaridad con las artistas.