EL MUNDO
› DOBLE ATAQUE EN MUMBAI,
CENTRO COMERCIAL INDIO, CAUSA DECENAS DE MUERTOS
Los dos bombazos y una tragedia en Bombay
Un doble atentado en Mumbai (antes Bombay), centro comercial de la India, causó al menos 47 muertes y más de cien heridos. Nadie los reivindicó, pero las sospechas recaen en un grupo panislamista, una organización de estudiantes islámicos y el nombre Al-Qaida.
Al menos 47 personas murieron y otras 161 resultaron heridas cuando ayer dos taxis explotaron casi simultáneamente en Mumbai, la capital financiera de la India, antes conocida como Bombay. El jefe de la policía local, R. S. Sharma, acusó a un grupo radical panislamista. “Es el grupo del que ya sospechamos en el pasado. No puedo dar su nombre porque podría perjudicar la investigación”, dijo. Por su parte, el viceprimer ministro y ministro del Interior Lal Krishna Advani nombró a un grupo estudiantil musulmán prohibido, el SIMI (por su sigla en inglés) Movimiento de estudiantes islamistas de India, que en el pasado colaboró con el Lashkar E Taiba, un grupo armado creado y actualmente prohibido en Pakistán y que, según el gobierno indio, tiene vínculos con Al-Qaida. “Desde noviembre, en Mumbai hubo varios ataques y, en la mayoría de los casos, el SIMI estaba implicado”, declaró. Hasta ahora, nadie reivindicó los atentados.
Ayer, cientos de turistas y vendededores ambulantes pasaban la tarde en la Puerta de India, un arco que está al sur de Mumbai y es un importante punto turístico. A pocos metros está el mercado más conocido de la ciudad y el célebre hotel Taj Mahal, que ha hospedado a famosos como el príncipe Carlos y Michael Jackson. De pronto, un taxi voló en pedazos y la multitud empezó a correr enloquecida. A los pocos minutos, un segundo taxi, estacionado cerca del templo hindú Mumbadevi, en el centro de la ciudad, saltaba por el aire. Las explosiones causaron daños importantes en varias playas de estacionamiento y edificios cercanos. Todos los vidrios del Taj Mahal estallaron con la primera explosión. Según Rajendra Darda, viceministro del Interior del estado de Maharashtra, donde está ubicada Mumbai, los explosivos estaban en los asientos traseros de dos taxis estacionados. “El techo de un taxi voló y aterrizó a más de 100 metros, cerca de la entrada del Taj Mahal”, declaró Kanak Raja, que en el momento de la explosión estacionaba su auto cerca de la Puerta de la India. “Cuando escuché el estruendo, di marcha atrás a toda velocidad”, declaró Tanaji Pawar, que trabaja como chofer de una línea de colectivos. “Ayudé a algunas personas heridas metiéndolas en autos particulares y taxis”, dijo. “Todo era un caos. Sabía que algunos heridos no tenían ninguna posibilidad de sobrevivir. Estaban muertos”, contó. Los cuerpos de las víctimas fueron alineados en el suelo mientras algunos voluntarios ayudaban a los médicos y las enfermeras a transportar a los heridos a distintos hospitales de la ciudad. A la policía le espera mucho trabajo, ya que muchos cadáveres quedaron desfigurados y esto dificultará su identificación.
El jefe de policía de Mumbai, R. S. Sharma, dijo que se arrestó a un taxista que, aparentemente, fue visto estacionando su auto cerca de la Puerta de la India. Y agregó que los explosivos utilizados fueron fabricados en India y eran del mismo tipo de los que se usaron otros atentados en esa ciudad. A las pocas horas de los ataques, la policía encontró nueve detonadores de minas en las vías de un tren, a 85 kilómetros de Mumbai. Por ahora, el gobierno piensa que el SIMI podría ser el autor de los atentados de ayer. Pocos días después de los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos, India prohibió las actividades de este grupo y encarceló a varios de sus líderes por considerar que la organización alimenta la violencia religiosa en India y está vinculado a la red terrorista Al-Qaida. Para Nueva Delhi, los combatientes de Lashkar E Taibi son responsables de gran parte de los ataques separatistas perpetrados en la Cachemira india durante los últimos años.
El primer ministro indio Atal Behari Vajpayee condenó los atentados “vigorosamente”, mientras que el gobierno de Pakistán, vecino y eterno rival de India, dio sus condolencias a las familias de las víctimas. Mediante un comunicado, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, condenó los atentados y expresó sus condolencias al gobierno indio. “El secretario general condena rotundamente los ataques terroristas en Mumbai que causaron la muerte de más de 40 inocentes y un número aún mayor de heridos”, indicó su vocero. Y agregó que Annan “se opone totalmente a cualquier acto de terrorismo”.