Las autoridades venezolanas evacuaron ayer a cientos de familias de la llamada Torre de David, un edificio de 45 pisos ubicado en Caracas que fue invadido por gente en estado de calle hace siete años y que hace dos recibió un reconocimiento por su estructura en la bienal de arquitectura de Venecia. La Torre Confinanzas (como se la conoce originalmente), erigida en el centro de Caracas, pertenecía a un grupo financiero que quebró durante la crisis bancaria que tuvo lugar a mediados de los ’90. A pesar de no haber sido terminada su construcción, fue invadida por cientos de familias que la acondicionaron e impusieron normas propias de convivencia. El ministro para la Transformación de Caracas, Ernesto Villegas, señaló que la evacuación no representaba un desalojo, sino un traslado para reubicar a las familias en lugares más estables.

Villegas dijo que la torre presentaba un serio riesgo para la integridad de las personas y que era insegura por la falta de muros de contención en las escaleras. También señaló que varios niños cayeron al vacío por esa causa. Asimismo, señaló que las familias fueron llevadas a las afueras de Caracas, donde serán instaladas en nuevas casas. El ministro también aseguró que el traslado de los habitantes de la Torre de David se desarrolló en el marco de una operación pacífica, pues los soldados que participaron en la evacuación iban desarmados. La torre en cuestión tiene una altura de 190 metros y es el segundo edificio más alto de Caracas, después de las dos torres de Parque Central, que miden 225 metros y tienen 64 pisos respectivamente. “No se trata de un desa-lojo. Se trata de una operación coordinada con la comunidad de la Torre Confinanzas para el traslado de familias desde acá hasta otros urbanismos”, manifestó Villegas. A su vez, indicó que las familias vivían en la torre en condiciones precarias de altísimo riesgo. “La torre no guarda las condiciones mínimas para una vida segura y con dignidad”, aseguró el ministro. Y calificó de tontos los rumores respecto de que el edificio será desalojado y remodelado para su venta a un grupo chino, dentro de la alianza económica que Venezuela trabó con el gigante asiático.

En el complejo viven 1156 familias y se espera que esta semana sean evacuadas más de 160, en la que será la primera fase de evacuación.

En 2012 la torre fue reconocida en la bie-nal de Venecia, después de que un grupo de arquitectos presentara el proyecto “Torre de David, gran horizonte”, para rescatar los espacios del edificio. “Se premió a las transformaciones que esas personas realizaron en la edificación. Se premió el hecho de que consiguieran energía en un edificio que, se suponía, ya no servía para nada; de que construyeran un tanque de agua, hicieran jardines hidropónicos y crearan instalaciones sanitarias. Se reconocieron los dibujos que nosotros hicimos de todas esas prácticas”, comentó el arquitecto Alfredo Brillembourg, uno de los diseñadores del proyecto.

En su reconocimiento, el jurado de Venecia decidió destacar “a los habitantes de Caracas y a sus familias, que han creado una nueva comunidad y una casa a partir de un edificio abandonado e incompleto”. Sin embargo, Brillembourg señaló que el edificio se convirtió en una estructura infranqueable incluso para las autoridades policiales.