Los estudios realizados por el laboratorio austríaco a las presuntas cenizas y huesos de 43 estudiantes desaparecidos en México no permitieron identificar los restos debido al severo grado de incineración. Sin embargo, el Instituto de Medicina Forense de Innsbruck ofreció utilizar una tecnología nueva para seguir adelante con la investigación. Por otra parte, se sumará el apoyo de Alemania en los trabajos de identificación de los restos, según informó el ministro de Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier.

“El calor excesivo ha destruido el ADN y el ADN mitocondrial por lo menos hasta el punto en que los métodos rutinarios no pueden emplearse para un análisis exitoso”, explicó ayer la Procuraduría General de la República mediante un comunicado. El método que será utilizado a partir de la falta de resultados será el de Secuenciación Masivamente Paralela (MPS, por sus siglas en inglés), que ofrece mayor cantidad de chances de arrojar datos útiles, informaron los peritos austríacos a las autoridades mexicanas. No obstante, advirtieron que no pueden dar un pronóstico de éxito y que el principal riesgo es que los extractos de ADN sean consumidos sin obtener ningún resultado adicional. De acuerdo con esto, la Procuraduría General de México informó que pidió al laboratorio de la Universidad de Innsbruck que proceda de inmediato a realizar los estudios propuestos por la institución.

El pasado 26 de septiembre seis personas murieron, 25 resultaron heridas y 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa de Iguala, en el estado mexicano de Guerrero, desaparecieron después de que los policías locales se los entregaran a miembros del cartel Guerreros Unidos, que los asesinaron y quemaron en un basurero, de acuerdo con lo reconstruido por la fiscalía mexicana. El laboratorio informó a principios de diciembre que uno de los 17 restos enviados a Austria pertenece a Alexander Mora, uno de los 43 estudiantes desaparecidos.

En este sentido, Alemania ofreció ayer su colaboración a México para intentar lograr identificar a los 43 estudiantes desaparecidos. El ministro de Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, anunció la oferta de ayuda en la conferencia conjunta que precedió a su reunión en Berlín con el canciller mexicano, José Antonio Meade. Steinmeier, que resaltó la consternación que produjeron los hechos en la sociedad alemana, señaló que “si es requerida, Alemania podría ayudar en las tareas de identificación”.

En el medio de las investigaciones está también el reclamo y dolor de los padres de los estudiantes desaparecidos. Los familiares de las víctimas convocaron a nuevas marchas para el 26 de enero, la más importante en Ciudad de México, al cumplirse cuatro meses de la ausencia de sus seres queridos. “Convocamos al pueblo en general a que se concentre en la Ciudad de México en una manifestación el 26 de este mes porque cumplimos cuatro meses de sufrimiento, de desesperación, de ansiedad, y no hay ningún resultado a pesar de que hay muchos detenidos y no hay una pista real de lo que nosotros buscamos”, explicó Felipe de la Cruz, vocero de los familiares. Los padres de los estudiantes siguen buscando a sus hijos y afirmaron que no aceptarán la hipótesis de que están muertos hasta que no haya una comprobación científica. En este aspecto, el abogado de los familiares de los 43 desaparecidos expresó a la prensa el malestar de sus representados: “Antes de tomar la decisión, la Procuraduría General de la República debió consultar a los familiares”. Además comunicó que tampoco se solicitó permiso para realizar la nueva prueba científica a los restos, teniendo en cuenta el riesgo de que se pierdan por completo. “Eso va a impactar en la creencia de los padres de familia, la mayoría son campesinos, indígenas, y en sus tradiciones el tema del duelo son muy simbólicas”, agregó Rosales. En tanto, el abogado de los padres de las víctimas reclamó una reunión con las autoridades mexicanas para ratificar el acuerdo del 13 de enero, en el que se establece revisar todos los cuarteles del país. “A partir de esa reunión, si todavía sigue la línea de abrir todos los cuarteles para que podamos hacer la revisión, construiremos el formato como padres de familia y de manera conjunta con el gobierno. Pero si es solamente el cuartel de Iguala, claramente digo, los padres de familia no estaríamos yendo porque no tiene sentido.”