Fidel Castro recibió a los cinco “héroes”, como se conoce en la isla a los cubanos condenados por espionaje en Estados Unidos, dos de los cuales cumplieron sus penas y tres fueron canjeados por un espía en diciembre.

“Los recibí el sábado 28 de febrero, 73 días después de que pisaran tierra cubana” y “fui feliz durante horas” escuchando “relatos maravillosos de heroísmo del grupo”, señaló Castro en un artículo publicado en el diario oficial Granma. El medio publicó 13 fotografías del encuentro, que duró “cinco horas”, en las que Castro, canoso y más delgado, aparece con un equipo deportivo azul y camiseta blanca mientras conversa con los ex agentes, que fueron detenidos en Estados Unidos en 1998.

La demora del padre de la revolución cubana en reunirse con ellos en su casa alimentó en enero rumores en las redes sociales sobre el deterioro de su salud. En un intento por acallar los rumores, Granma publicó profusamente el 3 de febrero las primeras fotos de Castro en casi seis meses, tomadas durante su encuentro con un dirigente universitario cubano. El veterano político explicó que tardó en recibir a los agentes porque “lo principal a su llegada era saludar a sus familiares, amigos y al pueblo, sin descuidar un minuto la salud y el riguroso chequeo médico”.

En todas las imágenes publicadas ayer, Castro, de 88 años y retirado del mando desde 2006, está sentado, y en algunas aparecen también su mujer, Dalia Soto del Valle, y su sobrino, el coronel Alejandro Castro Espín, hijo del presidente Raúl Castro.