Estados Unidos conmemoró ayer sin mucha pompa el 40 aniversario del asesinato de John F. Kennedy, aunque los medios han multiplicado sus reportajes sobre el trigésimo quinto presidente norteamericano y muchas personas se congregaron espontáneamente ante su tumba. En Dallas, escenario del magnicidio, se inauguró una exposición de fotografías inéditas del presidente. Por la noche, una orquesta sinfónica ejecutó por primera vez en esa ciudad texana la “Misa” en memoria del presidente que fue compuesta en 1971 por Leonard Bernstein a pedido de la viuda, Jacqueline Kennedy.
Tras el homenaje del viernes del presidente George W. Bush, numerosos ciudadanos se acercaron el sábado a la tumba de Kennedy en el cementerio de Arlington, cerca de Washington, en medio de las pocas conmemoraciones oficiales. Jubilados, familias y grupos de escolares se congregaron a primeras horas de la mañana, bajo un sol radiante, alrededor del memorial, adornado por flores blancas depositadas por anónimos. Una foto de JFK y de su sonriente esposa, Jackie, está sobre la tumba, acompañada por un mensaje emotivo: “Difícil creer que ya pasaron 40 años - tantas esperanzas, tantas lágrimas - jamás olvidaré ese terrible día”.
Los canales de televisión continuaron consagrando ayer una gran parte de su programación a John Kennedy. Desde hace una semana, libros, programas de televisión, conferencias, exposiciones, conmemoran lo que al parecer Kennedy sigue representando para los estadounidense: el idealismo de un mundo que ya fue. El viernes Bush evocó al presidente asesinado con “un sentimiento de pérdida que resiste el paso de los años”. “Este fin de semana el pueblo estadounidense tiene en su pensamiento las imágenes de hace 40 años (...) John F. Kennedy partió hace casi tantos años como los que vivió, y sin embargo su memoria aún enorgullece a nuestra nación”, indicó Bush en un comunicado.
Varios libros acaban de ser publicados en ocasión del aniversario de la muerte de una de las personalidades más influyentes del siglo XX y acerca del misterio que aún rodea su desaparición. Un sondeo realizado por la cadena de televisión Fox News muestra que el misterio acrecentado tras el asesinato del presunto asesino, Lee Harvey Oswald, por parte de alguien cercano a la mafia continúa: 74 por ciento de los encuestados creen que no se ha dicho todo sobre la muerte de Kennedy y sólo 14 por ciento creen que las explicaciones dadas son suficientes para explicarla.