El líder de Podemos, Pablo Iglesias, se presentó por primera vez en el Palacio de La Zarzuela, residencia oficial de la monarquía española, para encontrarse a solas con el rey Felipe VI. El dirigente izquierdista se entrevistó con el monarca para contarle sobre su proyecto de acuerdo de Gobierno entre su agrupación, los socialistas del PSOE e Izquierda Unida.

Pese a la ocasión especial, Iglesias no dejó de ser fiel a su estilo y se presentó con su tradicional “uniforme”: pantalón de jean y camisa blanca, arremangada y sin corbata. Puntual, cinco minutos antes de las diez de la mañana, y muy sonriente, el joven diputado no dudó en tutear a su majestad. “¿Cómo estás? Encantado”, le dijo el dirigente de Podemos al rey mientras estrechaba su mano. El jefe de Estado español, por su parte, se mostró igualmente sonriente y correcto, hasta el punto de hablar del tiempo durante los breves instantes que duró el posado para los medios. “Hoy hace un poquito de frío y lluvia, pero nos hace falta”, comentó. Iglesias, en tanto, llenó el hueco con un comentario sobre su primer trayecto hasta el palacio a través de los montes de El Prado. “He estado viendo los ciervos. ¡Qué maravilla!”

Tras el breve posado ante las cámaras en el salón de las audiencias, don Felipe invitó a Iglesias a acceder a su despacho y, antes de entrar en él, el jefe de la tercera fuerza política española fijó unos instantes su mirada en un retrato del Rey Juan Carlos. El dirigente de Podemos hizo trayecto hasta La Zarzuela a bordo de un Citroën gris, acompañado por la diputada y dirigente de su formación, Irene Montero, y su jefa de prensa. La reunión con Iglesias abrió la quinta y última jornada de la ronda de consultas del rey con los portavoces de los partidos representados en el Parlamento, que continuó al mediodía con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y cerró por la tarde con el mandatario español en funciones, el conservador Mariano Rajoy.

El rey conoció a Iglesias el 15 de abril pasado en Bruselas, cuando saludó a los eurodiputados españoles en el Parlamento Europeo, encuentro que se hizo célebre por el obsequio que recibió de Iglesias: una caja con las cuatro primeras temporadas de la serie Games of Thrones, que, según Iglesias, le daría “claves para entender la crisis política española”. Ayer, en cambio, Iglesias cayó con las manos vacías.