Fue un mal día para el mediador estadounidense Anthony Zinni. La posibilidad de un alto el fuego entre Israel y los palestinos brilló por un momento anoche para luego ser desmentida por ambas partes. Israel dijo primero que había aceptado participar en conversaciones gestionadas por Estados Unidos con los palestinos, pero éstos indicaron que sólo asistirían después de una retirada total de tropas israelíes de los territorios bajo gobierno palestino, y luego Israel desmintió que fuera a participar en reunión alguna. Pese a todo, ayer fue un día de relativa calma en los territorios, ya que el grueso de las fuerzas israelíes ya se había retirado previamente a la llegada de Zinni, bajo presión norteamericana y para darle al enviado mayor margen de maniobra.
“Mañana se realizará una reunión tripartita con la participación de altos funcionarios de ambas partes encabezados por el primer ministro Sharon con el propósito de lograr una tregua entre los dos lados e implementar las proposiciones de Tenet”, dijo un comunicado israelí. Pero los dirigentes palestinos dijeron que ellos no participarán en ninguna reunión hasta tanto Israel no termine de evacuar todas las áreas palestinas de Cisjordania y Gaza que sus fuerzas ocuparon en los últimos días en operaciones de búsqueda y captura de extremistas y liquidación de fábricas y depósitos de armas. El anuncio de una posible reunión se produjo dos días después de que el enviado Anthony Zinni llegara a la región en una misión para poner fin a la peor ola de violencia israelo-palestina en 17 meses de lucha. Dos misiones anteriores han fracasado después de ser absorbidas por el derramamiento de sangre. El director de la CIA, George Tenet, ha propuesto un plan escalonado que lleve al fin del conflicto. Sharon ha sostenido conversaciones en el pasado con estrechos allegados al líder palestino Yasser Arafat, pero su presencia en la reunión anunciada ayer hubiera marcado la primera vez en que participe directamente en conversaciones de cese al fuego encaminadas a poner fin a la violencia.
Raanan Gissin, el portavoz de Sharon, dijo que la reunión trilateral había sido aceptada en una reunión celebrada en las últimas horas del sábado entre Sharon y Zinni en el rancho del líder israelí en el sur de Israel. “Allí acordaron realizar mañana una reunión tripartita con Sharon en representación nuestra, Zinni por Estados Unidos y un alto funcionario palestino para elaborar una declaración de alto al fuego”, dijo Gissin. Respondiendo a la negativa palestina de asistir a una reunión antes de la retirada israelí de todas las áreas palestinas que sus fuerzas han ocupado en los últimos días, Gissin dijo: “Hemos consentido de nuestra parte en asistir. Ellos pueden llevar a quien quieran. La cuestión de otros nuevos despliegues o el cese de nuestra actividad militar tendrá que ser tratada en otras negociaciones y con reciprocidad palestina, incluso que ellos paren la violencia”.
Durante las últimas semanas, el nivel de la confrontación escaló de manera radical. Los palestinos lanzaron varios misiles Qassam-2, de entre ocho y 10 kilómetros de alcance, contra ciudades israelíes, y desarrollaron nuevos explosivos que destruyeron tres tanques Merkava -última maravilla de la tecnología militar israelí– enviando al mismo tiempo atacantes suicidas dentro de Israel. El gobierno de Sharon replicó enviando a sus fuerzas a operaciones de búsqueda y captura de redes terroristas y destrucción y decomiso de arsenales y fábricas de armas en las zonas palestinas autónomas.
Paralelamente, hubo nuevos movimientos diplomáticos. El martes, y por iniciativa estadounidense, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó la resolución 1397, que por primera vez defiende la creación de un Estado Palestino. Se trata de un gesto simbólico, pero mostró un giro de Estados Unidos, reforzado por las críticas del Departamento de Estado norteamericano contra la política de represalias de Sharon.
En una seguidilla de presiones, Estados Unidos finalmente logró que Israel se retirara de Ramalá –la virtual capital palestina– pero no delresto de sus posiciones en territorio palestino. Y como los palestinos exigen esto como prerrequisito, la tercera de Zinni puede no ser la vencida.