El miércoles de resaca de la visita, la prensa cubana destacó en sus portadas la despedida del mandatario Raúl Castro al presidente estadounidense y publicó artículos con mirada crítica sobre el discurso que dirigió a los ciudadanos en la isla. Así, Cuba volvió ayer a la normalidad tras la visita del presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, que dejó en la isla varios mensajes para la población y acuerdos de índole empresarial.

El diario Granma, el órgano oficial del Partido Comunista, saludó la visita del jefe de Estado pero con reservas. “No somos opositores a los Estados Unidos, somos hermanos de la gente de bien, sencilla y creadora y le tendemos la mano a su gobierno”, publicó. “Siempre que esté dispuesto a respetar el camino elegido por Cuba, que tanta sangre y sacrificios costara”, aclara. En el interior del diario, un articulista advierte de que el modelo de sociedad a la que aspira Cuba “no es la corrupta Miami”. En cambio, se pregunta por qué el gobierno de los Estados Unidos, que reconoció como fallida la política de aislamiento, no pide también perdón por el embargo, al que tachó de “inmoral”.

Obama llegó el martes a los hogares cubanos con un discurso transmitido por televisión, que entre los ciudadanos provocó reacciones mayoritariamente positivas por su tono de respeto y la variedad de temas que tocó. A Carlos, un orfebre de 35 años, le pareció correcto que Obama se haya mostrado informado de las cuestiones concretas que le interesan a los cubanos. “Me pareció muy estimulante la manera en que habló a los cuentapropistas como yo, que tenemos aspiraciones de tener nuestros propios negocios”.

Por su parte, Cristina, maestra jubilada, resaltó la forma en que se dirigió a la población, aunque no le convencieron sus planteamientos sobre la democracia “pese a que reconoció que en su país no es perfecta”. Quienes siguen impactados por el paso del presidente estadounidense por la isla son los trabajadores del paladar (restaurante privado) San Cristóbal, donde Obama y su familia cenaron en su primera noche en Cuba. El restaurante, ubicado en la popular barriada de Centro Habana, planea preservar y exhibir la silla y la dorada taza de café que usó el mandatario en el local y llamar a partir de ahora Salón Presidencial al área donde cenó.

Además de intenso, el paso de Obama fue fructífero en cuanto a acuerdos empresariales, principalmente en el sector turístico. Uno de los más destacados es el suscrito por el grupo estadounidense Starwood para operar dos hoteles en La Habana: es el primer acuerdo bilateral de Cuba con una empresa hotelera estadounidense desde 1959. Además el portal de alquiler de viviendas Airbnb anunció una ampliación de su licencia por la que turistas de todo el mundo y no solo de Estados Unidos podrán alojarse en las 4000 residencias que la empresa tiene en Cuba, mientras que Booking.com será la primera estadounidense de reservas de hoteles en línea que operará en la isla.