EL MUNDO
› FRANCIA LANZO UNA BUSQUEDA DE UN HOMBRE CON UNA MINIBOMBA
La cacería del pasajero del vuelo 68
Un hombre que debía abordar un vuelo de París a Los Angeles en Nochebuena pero que no se presentó en el aeropuerto era objeto de una busca generalizada en Francia. Se teme que el hombre tenga una minibomba capaz de burlar los controles de los aeropuertos.
Por John Lichfield y Andrew Buncombe *
Desde Washington y París
Anoche empezó la cacería de un sospechoso de estar vinculado con Al-Qaida. El hombre en cuestión no se presentó en un reciente vuelo de París a Los Angeles y así desató los miedos del gobierno norteamericano, que desde la semana pasada continúa cancelando vuelos transatlánticos por el riesgo de un ataque terrorista.
Funcionarios franceses dijeron que la policía antiterrorismo busca a un hombre llamado Abdoulaye, que en Nochebuena no se subió al vuelo de Air France con destino a Los Angeles. El gobierno estadounidense cree que tal vez su nombre completo sea Abdou Hai, un afgano supuestamente vinculado con la red Al-Qaida. El canal norteamericano ABC informó esta semana que funcionarios de ese país temen que el hombre esté viajando con una minibomba capaz de evadir los sistemas de detección de los aeropuertos. El canal también dijo que la policía francesa, que busca a Abdoulaye, hizo allanamientos en Lyon y el norte de París luego de haber recibido información norteamericana. Mientras, la CNN afirmó que funcionarios estadounidenses creen que este misterioso pasajero quizá sea piloto. En Francia, ningún funcionario confirmó la información sobre la bomba o los allanamientos. Pero el ministro de Justicia de ese país, Dominique Perben, dijo que “en este momento sólo puedo decir que estamos buscando a alguien”. Las autoridades francesas informaron a sus pares británicos sobre esta búsqueda.
Tres vuelos de Air France hacia Los Angeles fueron cancelados en Nochebuena y Navidad luego de que Estados Unidos advirtiera a Francia que había detectado varios nombres sospechosos en las listas de pasajeros. Previamente, funcionarios de los dos países habían dicho que esta advertencia era una falsa alarma y que todos los pasajeros habían sido revisados y resultaron ser inofensivos. Pero ahora parece que éste fue un cuento para distraer la atención de la actual búsqueda de uno de los pasajeros que el 24 de diciembre no se presentó en el vuelo 68 de Air France y cuyo paradero se desconoce desde entonces.
Un funcionario de Bush dijo que “en ese vuelo había varios pasajeros que generaban preocupación y ahora estamos trabajando con nuestros socios internacionales para asegurarnos de que todos los pasajeros de ese vuelo hayan sido interrogados. Dos pasajeros no se presentaron en el check-in. Uno fue exculpado y el otro sigue sin aparecer”. Entretanto, funcionarios franceses declararon que, cuando reservó su pasaje aéreo, el pasajero en cuestión se identificó como “Monsieur Abdoulaye”. Los agentes antiterrorismo estadounidenses temen que él sea Abdou Hai, un afgano que supuestamente estuvo en los campos de entrenamiento de Al-Qaida. Según el informe de ABC, el hecho de que este hombre continúe suelto “es uno de los factores que han contribuido a la actual paranoia en torno de los vuelos transatlánticos”.
Desde el 21 de diciembre, cuando Estados Unidos elevó el nivel de su alerta de seguridad a “alto” o Código Naranja, Washington exigió la cancelación de varios vuelos desde Gran Bretaña a Estados Unidos. Otros fueron retrasados durante varias horas, mientras las listas de pasajeros eran revisadas por varias agencias de seguridad norteamericanas. Washington también pidió que en todos los vuelos con destino a Estados Unidos viajaran agentes armados de incógnito. Además, inició un controvertido programa de registro fotográfico y de huellas dactilares a todos los extranjeros que lleguen a ese país.
“Cuando alguien no se sube a un avión, lo importante es saber por qué no lo hizo”, declaró el martes el ministro Perben. Fuentes francesas dijeron que no saben si el sospechoso está viajando con un pasaporte francés, tal como ABC había informado. Dijeron que no hay pruebas de que “M. Abdoulaye” sea el terrorista afgano cuyo nombre es muy similar. Todos los otros “nombres sospechosos” identificados por Estados Unidos en los vuelos a Los Angeles en Navidad resultaron ser inofensivos. De todas formas, el hecho de que las autoridades sean incapaces de ubicar a un hombre es una preocupación legítima.
Aparentemente, en Francia y Estados Unidos hay cierta irritación por la filtración de la cacería del pasajero del vuelo 68. La CIA rechazó el informe de ABC antes de que éste fuera confirmado, en parte, por el ministro francés de Justicia, el martes a la mañana. Más tarde, el ministro de Interior de Francia, Nicolas Sarkozy, criticó implícitamente a su colega: “Es muy pronto para decir algo sobre este caso... Prefiero hablar sólo cuando todos los datos hayan sido verificados”, dijo.
El martes, varios cazas norteamericanos escoltaron a un avión de pasajeros que viajaba de Francia a Cincinnati luego de que la campera de una joven desatara un alerta de seguridad. A la mujer no se le permitió abordar el avión porque en su campera se encontraron pilas y cables. Más tarde se confirmó que se trataba de una “campera térmica” y que la mujer no presentaba ninguna amenaza. De todos modos, funcionarios estadounidenses ordenaron que el vuelo fuese escoltado no bien entrara en el espacio aéreo norteamericano.
El plan para desplegar agentes armados en todos los vuelos a Estados Unidos ha chocado con la resistencia de algunos países que creen que los aviones deberían posponerse o cancelarse si hay una amenaza de seguridad que requiere la presencia de un agente. Irlanda, que tiene la presidencia de la Unión Europea, quiere convocar a una reunión de dirigentes de organizaciones aéreas de Europa para discutir el tema el próximo mes.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Milagros Belgrano.