El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, inició hoy su primera visita oficial a España, luego de haber asistido a la cumbre de la OTAN en Varsovia (foto, con Kerry).

Acompañado por su esposa, Michelle, el presidente irá a Sevilla, como primera etapa de una visita de tres días que se divide entre el sur y Madrid y que se ha visto ensombrecida por el tiroteo contra policías en Dallas, hasta el punto de desatar especulaciones sobre su posible cancelación. El rey Felipe VI hará de guía el domingo en un paseo matutino que ambos darán por la capital de Andalucía, antes de que Obama parta hacia la base naval de Rota, en la vecina provincia de Cádiz, donde recorrerá el destructor USS Ross y se dirigirá a las tropas.

“Esta visita encaja perfectamente con la cumbre de la OTAN ya que España es un aliado clave”, según Charlie Kupchan, responsable de asuntos para Europa en la Casa Blanca. “En Morón y en Rota hay una cooperación estratégica estrecha. Es importante la visita a Rota en particular porque allí hay estacionados cuatro buques de la Armada de Estados Unidos involucrados en la misión de Oriente Medio que contribuye a la capacidad antibalística que está iniciando la OTAN”.

El lunes será el día más político de Obama. El presidente demócrata se reunirá con el presidente español Mariano Rajoy en La Moncloa y de allí partirá al Palacio Real, en el centro de Madrid, al almuerzo que los reyes Felipe y Letizia ofrecen en su honor y en el de Michelle.

Rajoy considera al presidente de Estados Unidos un buen amigo de España. Rajoy y Obama han coincidido ayer en la cumbre de la OTAN que ha comenzado en Varsovia y donde el presidente estadounidense confirmó su viaje a España. Allí, Obama anunció que su Gobierno enviará mil soldados a Polonia, dentro del proyecto de la OTAN de establecer cuatro batallones en territorio polaco y las repúblicas bálticas ex soviéticas para reforzar militarmente su flanco oriental. “Puedo anunciar que Estados Unidos será la nación líder para la presencia de la OTAN aquí, en Polonia”, dijo Obama a periodistas después de reunirse con su homólogo polaco, Andrzej Duda. Además, insistió ayer que el Brexit no dañará las relaciones transtlánticas pero advirtió sobre un divorcio conflictivo del Reino Unido con la Unión Europea (UE), cuando Occidente busca mostrarse unido frente a Rusia.