EL MUNDO
› UNA BOMBA DESTRUYO UN BLINDADO DE EE.UU. EN IRAK
Baja norteamericana Nº 500
Por Patrick Cockburn *
Desde Bagdad
La cifra de militares estadounidenses muertos en Irak llegó ayer a 500 luego de que una gran bomba emplazada en una ruta destruyera un blindado norteamericano, matando a tres soldados de Estados Unidos y a dos milicianos de la defensa civil iraquí. La explosión, que ocurrió en Taji en una ruta 30 kilómetros al norte de Bagdad, dio vuelta al carro de combate Bradley que luego se prendió fuego, indicando que las guerrillas han empezado a usar bombas más grandes que en el pasado. Dos soldados norteamericanos más resultaron heridos, según al teniente Bill McDonald, portavoz de la Cuarta División de Infantería.
Los guerrilleros, principalmente concentrados al norte y al oeste de Bagdad en zonas musulmanas sunnitas, han recurrido mucho al método de plantar bombas en medio o al lado de las rutas para causar bajas a patrullas o convoys estadounidenses. También han usado morteros para bombardear bases estadounidenses. Los ataques de tiradores con subametralladoras y lanzadores misilísticos de granadas generalmente se han probado menos eficaces. El ataque en Taji lleva a 500 la cifra de soldados estadounidenses muertos por fuego enemigo o por accidentes desde que la guerra para derrocar a Saddam Hussein comenzó el 20 de marzo del año pasado. La cantidad de heridos en el mismo período es de 2895. Pero sólo 138 murieron y 550 fueron heridos en la guerra hasta el 1 de mayo, cuando el presidente Bush proclamó el fin de las grandes operaciones de combate.
Hasta ahora, el peor mes ha sido noviembre, cuando 81 soldados estadounidenses fueron muertos, aunque casi la mitad de esas bajas se produjo como resultado del derribo de tres helicópteros en diferentes partes del país. Unos 40 soldados fueron muertos en diciembre y 22 hasta ahora en enero. El mando militar estadounidense, consciente del impacto político de las bajas en EE.UU, ha buscado limitar las pérdidas dando mayor protección a las bases, limitando la cantidad de patrullas y apoyándose más en la policía, los cuerpos de defensa civil y el ejército iraquíes. Mientras tanto, el Ejército norteamericano ha iniciado una investigación sobre el abuso de los prisioneros en un centro de detención de la coalición dentro de Irak. Una declaración sobre el tema no dijo qué tipo de abuso estaba bajo investigación, pero los iraquíes dicen que generalmente sufren los peores maltratos después de ser detenidos y antes de llegar a un centro de detención.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.