El vicepresidente de Estados Unidos, Joseph Biden, aseguró ayer que su gobierno prepara una respuesta a Rusia por haber lanzado ciberataques para influir en las elecciones estadounidenses, y que se asegurará de que tenga el máximo impacto posible. “Vamos a enviar un mensaje (a los rusos). Tenemos la capacidad de hacerlo”, sostuvo Biden en una entrevista televisada ayer por la cadena NBC News. “El lo sabrá (cuando llegue la respuesta estadounidense)”, sentenció con una media sonrisa Biden, en referencia al presidente ruso, Vladimir Putin.

Aunque el vicepresidente insistió en que la respuesta de la Casa Blanca será proporcional al pirateo realizado por Rusia, cuando el entrevistador de la NBC News le preguntó si el público podrá enterarse cuando esa represalia tenga lugar, Biden respondió tajante: “Espero que no”. La semana pasada, Washington acusó a Moscú de lanzar ciberataques con el objetivo expreso de influir en las elecciones presidenciales de noviembre y le atribuyó, entre otras cosas, el robo de 20.000 correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata (DNC) que fueron publicados por WikiLeaks.

La cadena de televisión NBC informó el viernes, citando a fuentes de los servicios de inteligencia estadounidenses, que la CIA tiene la tarea de presentar opciones a la Casa Blanca para una operación clandestina y de amplio alcance cibernético contra el Kremlin. Ex funcionarios de inteligencia agregaron que la CIA habría reunido ya documentos que podrían exponer al presidente ruso. En tanto, Vladimir Putin respondió ayer a las amenazas de Estados Unidos al asegurar a medios rusos desde la India que Estados Unidos escucha y espía a todos.

“De nuestro amigos y socios estadounidenses se puede esperar cualquier cosa”, dijo Putin a la prensa durante la cumbre de los países del grupo Brics, en la India. El mandatario sostuvo además que no hay nada nuevo en el ciberespionaje e insistió: “¿Acaso no sabemos que escuchan y espían a todos?”. “Esto se sabe desde hace mucho, no es ningún secreto, los testimonios sobran, y gastan en ello miles de millones de dólares”, remató.

Y agregó: “La única novedad consiste en que es la primera vez que Estados Unidos lo reconoce a tan alto nivel y, en segundo lugar, profiere una amenaza, lo que no se corresponde con las normas de las relaciones internacionales”. El mandatario advirtió que sacrificar las relaciones ruso-estadounidense en el curso de los acontecimientos de la política interna de Estados Unidos es dañino y contraproducente, y negó que Rusia busque influir en el resultado de las elecciones estadounidenses. “Alguien quiere la confrontación, no es nuestra opción. Pero eso significa que habrá problemas, algo que no queremos. Por el contrario, nos gustaría buscar puntos de contacto para resolver los problemas de carácter global que afrontan Rusia, Estados Unidos y el mundo”, aseguró Putin.

Biden aseguró que no le preocupa que la gente pierda confianza en el resultado de las elecciones de noviembre, al afirmar que la capacidad de Rusia para afectar fundamentalmente los comicios no es la que la gente piensa. El episodio de ciberataque deterioró la relación entre Estados Unidos y Rusia, muy debilitadas ya en las últimas semanas por el fracaso de los esfuerzos para lograr un alto el fuego en Siria, y que ahora se encuentran en uno de sus puntos más bajos en los últimos años.