Por David Usborne*
Desde Nueva York

Los demócratas tuvieron un agregado inesperado a la lista de oradores en su convención nacional política que comienza en Boston en apenas dos semanas. No es exactamente un demócrata, pero con seguridad tampoco es un republicano a pesar del nombre famoso de su padre. Es Ron Reagan, el hijo del ex presidente. Los organizadores de la convención, que comienza el 26 de julio, confirmaron que Reagan será uno de los destacados oradores de una de las noches. Un liberal y duro crítico de Bush se espera que hable sin embargo sólo de su apoyo a la flexibilización de restricciones federales para la investigación de células madre.
“Los valientes esfuerzos de Ron Reagan para la investigación de células madre añaden una poderosa voz a la de los millones de estadounidenses que esperan curas para sus hijos, para sus padres y para sus abuelos”, dijo David Wade, un vocero de John Kerry, cuya nominación para postularse como presidente será confirmada en Boston. Los organizadores ven su aparición, sólo pocas semanas después de que el país lloró por la muerte de su padre, como una oportunidad para molestar a los republicanos que llevarán a cabo su convención en la ciudad de Nueva York un mes más tarde. “Si me hubieran pedido que dijera una pocas palabras acerca de sacar a Bush de sus funciones, no lo hubiera hecho”, le dijo Reagan ayer al The Philadelphia Inquirer.
Reagan, de 46 años, se unió a su madre Nancy, para hacer lobby en Washington por un cambio de política en la investigación de células madre. En 2001, el presidente Bush eliminó el aporte de fondos federales para la investigación de células madre, que ayudaría a los médicos a encontrar nuevas curas para enfermedades como Alzheimer, que atacó las facultades mentales del ex presidente Ronald Reagan durante diez años hasta su muerte el mes pasado a los 94 años. Hasta ahora Bush no ha respondido a los pedidos de la familia Reagan. Los republicanos conservadores se oponen fuertemente a apoyar la investigación de células madre, que involucra el tomar material de embriones humanos fertilizados de un día de edad. Los críticos dicen que es equivalente a un aborto.
“Esto me da una plataforma para educar a la gente sobre la investigación de células madre”, dijo Reagan de su invitación a Boston. “La derecha conservadora tiene una forma más bien simplista de caracterizarlo como asesinato de bebés. No estamos hablando de dedos o cerebro. Esto es una masa de un par de cientos de células no diferenciadas.” Que Reagan, que se describe a sí mismo como un independiente, no estaba de acuerdo con su padre políticamente es algo conocido desde hace años. El desconcierto del ex presidente cuando su hijo abandonó la Universidad de Yale para unirse a una compañía de ballet era famoso.
Hubo cierto asombro, sin embargo, cuando Reagan hijo pareció usar el discurso que hizo en el funeral de su padre en junio para fustigar al presidente Bush sobre su tendencia a citar a Dios para hacer y explicar su política. Reagan que vive en Seattle con su mujer, Doria, les dijo a los presentes en el funeral que su padre “nunca había cometido el error fatal de tanto políticos, en usar su fe como un as en la manga para obtener ventajas políticas”. Más tarde dijo que no había tenido la intención que esta observación fuera tomada como un crítica directa a Bush. “Apoyaré a cualquier candidato viable que pueda derrotar a Bush.” Añadió: “El partido republicano de ahora no es el de mi padre, no porque eso me preocupe demasiado de una u otra forma. No soy republicano y nunca lo fui”.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.

Traducción: Celita Doyhambéhère.