El ejército estadounidense lanzó ayer, con el aval del gobierno iraquí, un ataque aéreo en la ciudad sunnita rebelde de Faluja, al oeste de Bagdad, contra la red del terrorista jordano Abu Musab al Zarqaui, quien al parecer puso precio a la cabeza del primer ministro iraquí, Iyad Allaui. Catorce personas murieron y otras tres resultaron heridas en esa “operación selectiva”, dirigida contra escondites en los que se encontraban al menos, 25 personas sospechosas de estar relacionadas con el grupo de Zarqaui, según dijeron fuentes del ejército estadounidense.
El primer ministro iraquí dio previamente luz verde a la Fuerza Multinacional para atacar en Faluja “lugares en los que hay escondites de terroristas”, declaró un responsable gubernamental. Estados Unidos considera a Zarqaui, jefe del grupo “Unificación y guerra santa”, el principal sospechoso de los atentados en Irak y ofrece una recompensa de 25 millones de dólares por él. Durante las últimas semanas hubo varios ataques contra Faluja y decenas de habitantes protestaron ayer para exigir compensaciones por la destrucción de sus bienes. Una página islamista publicó un comunicado atribuido al grupo de Zarqaui en el que se ofrece una recompensa de 285.000 dólares por Iyad Allawi.