EL MUNDO
› DESCONGELARON LAS RELACIONES CON TODA LA UE
Un Cuba Libre para Europa
Por Mauricio Vicent*
Desde La Habana
El gobierno de Fidel Castro restableció ayer los contactos oficiales con las embajadas de Holanda, Eslovaquia, Polonia, República Checa y la representación diplomática de la UE en La Habana, las últimas que seguían “congeladas” en represalia a la política de Bruselas de invitar a los disidentes a la celebración de sus fiestas nacionales. El ministro cubano de Relaciones Exteriores, Felipe Pérez Roque, afirmó que la decisión se tomaba “atendiendo a las solicitudes respetuosas” recibidas en la última semana de los gobiernos de Luxemburgo, actual presidente de la UE, España y Bélgica, y a las gestiones personales del comisario europeo de Cooperación y Ayuda Humanitaria, Louis Michel.
La semana pasada, La Habana restableció los contactos con las embajadas de Francia, Reino Unido, Alemania, Italia, Austria, Grecia, Portugal y Suecia, y lo mismo hizo en noviembre con la de España. Las representaciones de Bélgica y Hungría siempre mantuvieron la interlocución oficial debido a que sus diplomáticos no celebraron recepciones con motivo de sus fiestas nacionales. El resto de los países miembros de la UE no tienen embajadas en La Habana. Pérez Roque expresó que la determinación de reanudar “los contactos oficiales a nivel del gobierno con todos los países de la UE” es resultado de la recomendación del Comité de América Latina de la UE (Colat) de “rectificar las decisiones que había adoptado sobre Cuba en junio de 2003”, cuando Bruselas adoptó varias sanciones políticas en protesta por el encarcelamiento de 75 disidentes y la ejecución de tres secuestradores de una embarcación con la que pretendían llegar a EE.UU.
El 14 de diciembre, el Colat recomendó a los 25 suspender hasta junio las polémicas invitaciones a los opositores, pero no invitar tampoco a altos funcionarios del gobierno cubano. Asimismo, pidió revocar las sanciones consistentes en dar un perfil bajo a los actos culturales europeos en territorio cubano y en reducir al mínimo las visitas de altas autoridades de los gobiernos europeos a la isla. Los 25 deberán aprobar a fin de mes las recomendaciones del Colat, que incluyen mantener los contactos con la oposición cubana, pero de un nuevo modo y de forma “estructurada”.
La última medida del gobierno, después de la reciente excarcelación de siete disidentes del Grupo de los 75, fue valorada en medios diplomáticos como un nuevo “gesto” que favorece la normalización de las relaciones. El presidente de la ilegal Comisión de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, Elizardo Sánchez, expresó su escepticismo y señaló que para que cuaje cualquier “normalización”, el gobierno “debería excarcelar a los tres centenares de presos políticos y respetar los derechos humanos y las libertades democráticas”. Sánchez hizo público ayer un informe en el que cifra en 294 los sancionados o procesados en Cuba por motivos políticos al cierre de 2004, de los cuales 84 son considerados por Amnistía Internacional prisioneros de conciencia.
* De El País de Madrid. Especial para Página/12.