Dom 13.02.2005

EL MUNDO  › SE SUPO QUE EL PENTAGONO MIENTE SOBRE EL ENTRENAMIENTO LOCAL

Veamos cómo disimular los fiascos en Irak

Un día después de que Donald Rumsfeld, secretario de Defensa norteamericano, realizara una sorpresiva –y triunfalista– visita a Irak, trascendió que el Pentágono, que él dirige, está distorsionando las cifras sobre el nivel de entrenamiento de las fuerzas nativas.

Por Andrew Buncombe, Kim Sengupta
y Raymond Whitaker *
Desde Washington, Basora y Londres

El entrenamiento de las fuerzas de seguridad iraquíes, cruciales para cualquier estrategia de retirada para Estados Unidos y Gran Bretaña, está yendo tan mal, que el Pentágono ha dejado de dar datos sobre la cantidad de tropas locales disponibles para el combate, pudo saber este diario. En su lugar, solamente se emiten cifras sobre la cantidad de tropas que están disponibles.
El pequeño número de soldados, guardias nacionales y policías, capaces de operar contra la sangrienta insurgencia del país, está como camuflada en el total de iraquíes de uniforme, que incluye a reclutas novatos y a policías que están en las calles después de escasas tres semanas de entrenamiento. En algunos casos, no tienen armas, chalecos antibalas ni siquiera documentos que demuestren que están en la policía. La confusión resultante en torno a los números ha permitido a la administración norteamericana decir que está a mitad de camino de llegar a su objetivo de entrenar a casi 270.000 fuerzas iraquíes, incluyendo a alrededor de 52.000 tropas y 135.000 policías iraquíes. La realidad, según los expertos, es que podría haber tan poco como 5000 tropas, que podrían considerarse listas para el combate.
El abismo entre las tropas disponibles y el objetivo general de fuerzas de seguridad, totalmente entrenadas y equipadas, en realidad se ha ensanchado en los meses recientes, según John Pike, de GlobalSecu rity.org, un thinktank basado en Washington. Entre octubre y noviembre del año pasado, justo antes de que el Pentágono solapadamente dejara de dar cifras sobre la cantidad de tropas totalmente entrenadas, el déficit se había más que duplicado, de 69.400 a 159.000. En los niveles actuales, los objetivos no serían alcanzados hasta el año que viene.
El juego de ilusionismo en torno a las cifras de las tropas provocó un fuerte encontronazo durante los debates para confirmar como secretaria de Estado a Condoleezza Rice en el Senado. Después de que citara cifras del Pentágono, según las cuales 122.000 iraquíes habían sido entrenados, el senador demócrata Joseph Biden dijo: “Una y otra vez, esta administración ha intentado dejar a los norteamericanos con la impresión de que Irak tiene más de 100.000 policías militares y personal totalmente entrenados y competentes. Y esto simplemente no es cierto. Estamos a meses, tal vez a años, de llegar a nuestro objetivo.” David Isenberg, un analista del Consejo de Seguridad británico y norteamericano, dijo: “La palabra desastre es demasiado educada” para referirse a los esfuerzos de entrenar a tropas iraquíes. “No estamos siendo honestos sobre las cifras,” agregó. “No tenemos ningún consenso en torno a quién ha sido entrenado, ni de quiénes estamos hablando.” La insurgencia, que se ha llevado las vidas de 60 policías, soldados y futuros reclutas desde la elección, ha desorganizado ambos lados de la ecuación. No solamente ha forzado a las autoridades de la ocupación a aumentar dramáticamente su estimación de la cantidad de fuerzas de seguridad iraquíes requeridas sino que además, el entrenamiento y el reclutamiento han sido interrumpidos por los ataques constantes, las deserciones, las suspicacias políticas y un catálogo de errores de los invasores, comenzando con el desbande del ejército iraquí inmediatamente después de la guerra.
La fuerza policial iraquí es considerada el mayor fracaso, por estar mal entrenada y equipada. Funcionarios estadounidenses también dicen que miles de iraquíes están cobrando salarios policiales, pero que no trabajan, y casi la mitad de la fuerza ha sido enviada a seguir entrenándose.
Un coronel de la policía dijo: “Escucho constantemente que los estadounidenses nos han entrenado y nos han equipado. Pero parece ser que me lo perdí todo. Nos han enviado gente en la cual no confío para nada. He descubierto que los norteamericanos no han revisado los datos de estos hombres. ¿Y se preguntan porqué explotan comisarías y barracas del ejército?”. Mientras tanto, las recomendaciones de que más asesores estadounidenses sean adheridos a las unidades iraquíes suscitan temores de que esta política postergará aún más la salida de Irak.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Ximena Federman.

Subnotas

(Versión para móviles / versión de escritorio)

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS rss
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux