EL MUNDO
› TRAS EL “NO”, VILLEPIN PROMETE CREAR TRABAJO
El inicio de un plan ambidiestro
Por John Lichfield *
Desde París
Un cóctel bizarro de izquierda y derecha para crear empleo a través de proteccionismo, gasto público y menos burocracia fue propuesto por el nuevo primer ministro francés, Dominique de Villepin. En su primer discurso parlamentario, Villepin comunicó la iniciativa de París por una “fortaleza europea” para proteger los puestos de trabajo contra la globalización y la competencia asiática. Explicó: “Tenemos el derecho a demandar una preferencia económica europea, igual que los otros grandes bloques económicos.”
Villepin aseguró que el compromiso de Francia con la integración europea permanece “firme” a pesar del voto “no” a la propuesta de la Constitución de la UE hace diez días. Agregó, sin embargo, que Francia buscará maneras para establecer una “unión” con Alemania en un serie no específica de políticas –reforzando los miedos de que París y Bonn– que ahora podrían buscar crear un “centro interno” de los países de la UE.
La mayor parte del discurso de 55 minutos de Villepin ante la asamblea nacional ayer fue dedicado a un programa para combatir el desempleo -dando facilidades a las pequeñas empresas para que contraten nuevos empleados–, especialmente a los jóvenes. Un bono estatal de mil euros será entregado a cualquier persona desempleada que comience a trabajar luego de estar, al menos, un año sin empleo. El gobierno subsidiará, efectivamente, el salario de las personas contratadas por algunas pequeñas empresas.
Villepin, que no tiene experiencia previa en política social y económica, también prometió aumentar el gasto en proyectos de transporte y de medio ambiente. Anunció préstamos estatales para crear 100 mil puestos de trabajo, como servicio doméstico y niñeras. En total, prometió gastar 4,5 millones de euros extras en políticas relacionadas con el empleo el próximo año. Villepin prometió, sin embargo, que el gasto público francés se mantendrá congelado en términos reales y que respetaría el límite para préstamos del 3 por ciento del PBI que ha sido impuesto a los países que adoptaron el euro.
Villepin, un poeta publicado, historiador y diplomático de carrera, es un protegido del presidente Chirac, que nunca se ha presentando a una elección. Políticos, tanto de izquierda como de derecha, lo vieron como una elección extraña para responder a la insurrección populista que llevó al rechazo de la propuesta de la Constitución de la UE. El primer ministro dio una performance convincente ayer, aunque restringiendo sus peleas retóricas habituales y tratando de adoptar un equilibrio entre desregulación (para dejar contenta a la derecha) y llamados a la solidaridad social (para calmar a la izquierda).
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Laura Carpineta.