EL MUNDO
Retrazando el muro
El gobierno de Israel deberá modificar un tramo de 13 kilómetros de muro, según estableció ayer una sentencia dictada por el Tribunal Supremo. Con esta sentencia se resuelve un pleito planteado por un millar de vecinos de cinco municipios palestinos de la región de Kalkilia, al norte de Cisjordania, que aseguran que el trazado del muro construido durante el verano del 2002 los incomunica del resto del territorio palestino, obliga a vivir en una área cerrada e impide desarrollar su vida con plena normalidad. Los nueve magistrados del Supremo ordenan al ejército en su sentencia, de ochenta folios, revisar en un plazo no especificado pero que califican de “razonable”, el trazado del actual muro, para buscar alternativas que garanticen la vida normal de los palestinos afectados y traten de conjugarla con la seguridad del asentamiento judío cercano de Alfei Menashe, construido en 1983 y en el que viven 4600 colonos.