El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, reveló que es “objeto de amenaza directa” por parte del terrorismo islámico y que un kamikaze podría atentar contra él aprovechando su presencia en un partido de fútbol, según una entrevista publicada ayer por el diario italiano Libero. Berlusconi, propietario del equipo de fútbol Milan y asistente usual al estadio San Siro para presenciar los partidos más importantes, explicó que además de la amenaza que pesa contra él, “toda Italia está expuesta a ataques terroristas”. Ayer los servicios secretos italianos advirtieron acerca de la posibilidad de que un partido de fútbol a nivel internacional se convierta en el objetivo de un posible atentado terrorista. Además, Berlusconi volvió a mostrarse “contrario a la guerra en Irak”, argumentando que “nunca estuve convencido de que la guerra fuese el sistema mejor para llegar a dar la democracia a un país”.