El líder de Corea del Norte, Kim Jong Il, comenzó una misteriosa visita secreta a China trasladándose en tren a Pekín ayer por la mañana, según la agencia surcoreana de noticias Yonhap, basándose en reportes de autoridades del ferrocarril y declaraciones de diplomáticos surcoreanos. No obstante, el gobierno de Pekín no ha confirmado la visita, en tanto que la embajada norcoreana en la capital china negó que Kim estuviese en el país. Lo cierto es que por expresa petición del mandatario, sus visitas a China no se confirman oficialmente hasta que éste abandona el país. Este viaje sorpresa se produce en un momento de gran incertidumbre en torno de la reanudación de las negociaciones multipartitas sobre el programa de armamento nuclear norcoreano.