EL MUNDO
Los socialdemócratas en Alemania están inundados... de optimismo
Ayudado por la imagen de “decisión” que está mostrando frente a las inundaciones y por el estilo poco mediático de su rival, Gerhard Schroeder está comenzando a ganar en las encuestas.
Por John Hooper *
Desde Berlín
A menos de un mes de las elecciones generales en Alemania, el jefe de gobierno Gerhard Schroeder y su rival, Edmund Stoiber, de la Unión Demócrata Cristiana (CDU), se trenzaron en el primero de los dos debates televisivos previstos en esta campaña, un hecho inédito en los últimos años. Y el sondeo posterior al duelo, realizado por el Instituto Infratest/dimap, registró un ascenso en favor de Schroeder, con un 46 por ciento de aprobación frente a un 33 por ciento para Stoiber, mientras que el sondeo del canal ZDF marcó 37 por ciento para el canciller y 35 para su contrincante. Por otra parte, la policía alemana confirmó este fin de semana que fueron robadas las oficinas centrales de campaña electoral en Berlín del Partido Socialdemócrata (PSD) de Schroeder. Un vocero de la policía informó que robaron una laptop. No pudo confirmar el tipo de información que estaba archivada, pero Der Spiegel publicó ayer que el contenido era información confidencial que se refería a los movimientos claves de los candidatos en el último tramo de la campaña.
La revista informó además que también se robaron unas carpetas junto a la computadora. Se dijo que aparentemente el ladrón estaba bien informado sobre las medidas de seguridad del edificio, que está ubicado justo a unos metros de uno de los lugares en Berlín que cuenta con los más altos controles: la restaurada sinagoga central. Las noticias sobre el robo trascendieron con el descanso que se dieron en la campaña Schroeder y Stoiber horas antes del duelo televisivo de anoche. Schroeder, el primer jefe de gobierno en aceptar el desafío de una apuesta televisiva, entró al debate de 75 minutos animado con las encuestas que le mostraban que la marea se movía rápidamente en dirección suya.
Los cuatro sondeos publicados esta semana muestran una oscilación favorable a los socialdemócratas, que los encuestadores adjudicaron a la respuesta decisiva del canciller frente a las inundaciones de este mes en el sur y este del país. Una de las encuestas revela que la distancia entre Schroeder y Stoiber ha pasado de un cinco a un uno por ciento a favor del derechista.
Stoiber se puso quisquilloso cuando el canciller suspendió su campaña, invitó a otros líderes del gobierno a una reunión de alto perfil en Berlín y decidió luego postergar los recortes de impuestos a los ingresos y elevó el promedio de los impuestos a las corporaciones para compensar a las víctimas de las inundaciones. “La gente ve que pueden contar con el canciller en tiempos de crisis”, señaló Schroeder en una entrevista que concedió al diario de Colonia Kolner StadtAnzeiger, publicada el fin de semana. En una entrevista con el periódico Well am Sonntag, Stoiber le respondió: “Todo el mundo sabe que Schroeder ha fracasado en su batalla contra nuestro segundo desastre nacional: el alto desempleo”.
Los democristianos están esperando que, cuando amainen las inundaciones, el porcentaje del desempleo alemán (casi el 10 por ciento) vuelva a ser el tema central de la campaña, y volverán así al primer lugar en las encuestas. Sin embargo, con un tercio del electorado todavía indeciso, el duelo de anoche podría ser un factor decisivo. Schroeder, de quien se esperaba ampliamente que opaque a su oponente, dijo que la situación era “una oportunidad para que la gente conozca mejor a sus candidatos”. Entretanto, su rival pareció adjudicarse un lugar en desventaja al afirmar que “no es una cuestión de quién es el mejor actor”. Y agregó: “Al final del día la gente juzgará el trabajo que cada uno ha realizado”.
* De The Guardian de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: M.L.S.M.