Turquía lanzó ayer una masiva ofensiva terrestre (foto) sobre el norte de Irak, en la que murieron cinco soldados y al menos 24 combatientes kurdos, según informó anoche el ejército de Ankara. Tanto el gobierno estadounidense como el británico supieron de antemano del ataque, pero sólo lanzaron advertencias tibias. Desde Ankara respondieron que la inestable situación en la frontera requiere “medidas urgentes” y que no pueden esperar a los resultados de las negociaciones con Bagdad, auspiciadas por Washington. La ofensiva de ayer contó con diez mil soldados turcos y todo tipo de apoyo aéreo. Primero entraron los aviones cazas y bombardearon cinco puentes que unen los dos países y varias bases de la organización armada Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). Una vez que su trabajo había terminado, los siguieron los soldados, quienes siguen todavía allí. Según Ankara, sus hombres se retirarán cuando “alcancen sus objetivos”. Las autoridades del PKK tampoco denunciaron bajas, aunque sí adelantaron que están preparando un nuevo contingente de dos mil combatientes para proteger sus posiciones en la frontera.

PALESTINA.
Ayuda de EE.UU.

Estados Unidos destinará decenas de millones de dólares a ayuda humanitaria en los territorios palestinos, según anunció ayer la Casa Blanca. La mayor parte de los fondos, que serán canalizados por la ONU, se destinará a la Franja de Gaza, controlada por el partido fundamentalista Hamas desde junio del año pasado y afectada por un duro bloqueo por parte de Israel y la comunidad internacional. El Departamento de Estado controlará férreamente los fondos para asegurarse de que la ayuda llegue directamente a los 470 mil refugiados de la zona y no a oficiales de Hamas. El gobierno de Estados Unidos considera a este grupo una de las principales organizaciones terroristas del mundo y por eso se había negado a enviar ayuda hasta este momento. Sin embargo, la desesperante crisis humanitaria que llevó a más de medio millón de palestinos a tirar abajo el muro fronterizo con Egipto obligó a Washington y a Europa a revisar sus duras posiciones. A principios de marzo, Rice visitará Medio Oriente, donde anunciará los detalles del plan.