Dos marchas, con unos 100.000 asistentes cada una, polarizaron la población de Caracas entre partidarios (foto) y opositores del presidente Hugo Chávez. Las manifestaciones, que fueron fuertemente custodiadas por la policía, se realizaron, significativamente, en el 44 aniversario de la democracia en Venezuela. Ante miles de seguidores en el presidencial Palacio de Miraflores, Chávez prometió “acabar con el inmoral latifundio que ha frenado el desarrollo” y reiteró que entregará títulos de propiedad a los que pueblan en las villas miserias de Caracas, poniendo en ejecución su polémica ley de tierras, que aplica impuestos a propietarios de grandes extensiones de tierras ociosas. Los opositores a Chávez desfilaron con pancartas que decían “Impuestos de hambre”, junto a “Chávez vete ya”.