El general norteamericano que dio un giro a la estrategia militar en la guerra en Irak salió ayer a tranquilizar a los iraquíes y la comunidad internacional tras los atentados del miércoles. “No tengo dudas de que las fuerzas iraquíes tienen la capacidad de controlar a los elementos que están intentando reactivar la violencia sectaria, que dominaba al país en 2006”, aseguró el ex comandante estadounidense en Irak David Petraeus. Para el jefe del Comando Central de Estados Unidos el país ya no enfrenta un movimiento insurgente como en los primeros años posteriores a la invasión de 2003. Según el análisis del Pentágono, los atentados como los del miércoles, en los que murieron casi cien personas, son obra de grupos terroristas. Con ese argumento Washington sostiene que las fuerzas iraquíes no necesitan más de su apoyo. Las tropas norteamericanas se retirarán definitivamente el año próximo.