Desde Londres

El líder conservador David Cameron tuvo que aceptar la reforma electoral para convertirse en primer ministro, pero los liberal demócratas de Nick Clegg también tuvieron que abandonar su propuesta de una amnistía general para todos los inmigrantes ilegales. Fue un momento agridulce para los dos partidos.

La iniciativa migratoria de los liberal demócratas había sido una de las más criticadas durante la campaña, tanto por los conservadores de Cameron como por los laboristas del ahora ex primer ministro, Gordon Brown. Según el primero, una amnistía generalizada para los 800 mil inmigrantes que viven en el Reino Unido sin papeles provocaría un gran problema de seguridad para el país. Según Brown, la medida no haría más que incentivar a otros inmigrantes a entrar al país ilegalmente.

Pero en la desesperación por no quedar afuera del gobierno y después de haber conseguido su objetivo número uno –una reforma electoral que los beneficiara–, Clegg y su equipo de negociadores aceptaron bajarse de ese reclamo. También cedieron en otra promesa de campaña, el ingreso del país a la zona euro.

Anoche la mayoría del Partido Liberal Demócrata aprobó esa decisión, pero no está claro cuánto tiempo podrán mantener la disciplina dentro de sus filas, ya que la concesión dejó a varios diputados con una sensación de sinsabor.

A la hora de votar la mayoría apoyó un acuerdo que consideró aceptable, aunque no perfecto. Sin embargo, algunos veteranos miembros de la bancada liberal demócrata no dudaron en expresar su bronca. “No puede defender un gobierno así. No tengo ni idea de dónde me deja parado este acuerdo”, reconoció uno de los legisladores, de la ahora coalición oficialista.

El eje central del acuerdo, según revelaron más tarde los medios locales, serán la estabilidad económica y la reducción del déficit, que pasó del tres al doce por ciento desde el inicio de la crisis económica internacional. Según definieron ayer las dos bancadas, antes de que se cumplan los primeros cincuenta días del nuevo gobierno tendrán listo y aprobado el presupuesto de emergencia.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.