El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llamó ayer a su colega ecuatoriano, Rafael Correa, para “reiterarle el respaldo” tras la sublevación policial. “El presidente reiteró el respaldo de Estados Unidos al presidente Correa y las instituciones democráticas de Ecuador”, señala un comunicado oficial. Asimismo, Obama “destacó la importancia de resolver cualquier conflicto en Ecuador en el contexto del orden democrático y constitucional del país”, agrega la nota. El mismo día del inicio de la crisis, Washington había expresado su respaldo al gobierno ecuatoriano a través de un comunicado de la secretaria de Estado, Hillary Clinton, quien el viernes conversó telefónicamente con Correa. A comienzos de esta semana, el Departamento de Estado rechazó por “infundadas” las acusaciones del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, quien había denunciado que detrás de la intentona estaba “la mano” de Estados Unidos. También el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, manifestó la “certeza” de su gabinete de que el gobierno estadounidense no tuvo “nada que ver” con la crisis política de su país, aunque indicó que existen “grupos de poder no controlados por el gobiern” que habrá que investigar.