El jefe del FMI sumó otra acusación en su contra. Tristane Banon, una periodista francesa de 31 años, aseguró que no había denunciado a Dominique Strauss-Kahn porque su madre, una política socialista, la había persuadido de que eso no iba a ayudarla en su carrera. La explosición mediática y judicial del caso de acoso sexual por el que se lo acusa al funcionario, que está preso, la envalentonó para que sume sus acusaciones. Según ella, el funcionario había intentado abusar de ella cuando tenía 22 años. Según el relato que hace cinco años la periodista se animó a ofrecer en un talk-show, en el que nunca se mencionó el nombre del director del FMI, el acoso sucedió durante una entrevista que el hombre accedió concederle. “Aceptó verme, pero me dio una dirección que yo no conocía”, apuntó Banon, que es la ahijada de la ex mujer de Strauss-Kahn y muy amiga de su hija. “Quería agarrarme la mano, me dijo que no me podía ir hasta que no agarrase su mano. Luego fue el brazo, y luego más allá. Todo terminó demasiado mal. Fue una situación muy violenta. Acabamos luchando en el suelo. Lo pateé varias veces. Me desabrochó el corpiño y quiso bajarme los pantalones”, relató la joven, quien aseguró que, luego del suceso, Strauss-Kahn le envió un mensaje de texto que decía: “Así que entonces te asusté, ¿no?”.