Desde Madrid

Cayo Lara afirma que él representa la izquierda y no el PSOE. El candidato de Izquierda Unida durante esta campaña pidió directamente el voto a los socialistas desencantados. Su objetivo: hacer resurgir la tercera fuerza política española. Durante el primer gobierno de Zapatero, cuando el líder socialista llevó adelante una agenda de izquierda, a IU le costaba diferenciarse. Hoy, después de las medidas de ajuste que aplicó el partido gobernante, las divergencias saltan a la vista, según responde a Página/12 por mail el candidato. “Hay que subordinar a los mercados a la soberanía popular, se necesita voluntad política.” Y las encuestas lo corroboran. IU más que duplicaría sus votos de 2008 llegando al 9 por ciento y pasaría de dos a once diputados.

–Algunos analistas económicos entienden que la propuesta de IU de nacionalizar la banca y restablecer el tejido productivo deja de lado una cuestión macro importante en esta crisis: qué hace España con el euro.

–No tiene por qué haber ningún problema entre la nacionalización de la banca y el euro. Los lander alemanes tienen bancos públicos y las cajas francesas no han abandonado su carácter público. Otros países europeos cuentan también con instituciones financieras públicas. En cuanto al cambio de modelo productivo, ésta es precisamente la única vía de salida a medio y largo plazo de la crisis. A los mercados hay que subordinarlos a la soberanía popular expresada democráticamente. Se ha hecho en otros países y se puede hacer en España. Es un problema de voluntad política. El problema del euro, aunque está vinculado, tiene un origen diferente. El modelo de construcción europea impuesto por el neoliberalismo y la moneda única son incompatibles. Hay que construir una Europa de los ciudadanos y no de los mercaderes.

–En pocas palabras, ¿cuál es el paquete de medidas que postula para salir de la crisis y generar empleo?

–Resumiendo de forma esquemática, creemos que la crisis se manifiesta como una crisis de demanda. Por tanto, hay que crear empleo, aumentar el consumo y la inversión, estimular la economía real, combatir el déficit mediante un aumento de los ingresos fiscales a través de una reforma fiscal justa y la lucha contra el fraude y la economía sumergida; además de fortalecer los servicios públicos y la democracia.

–Frente a la más que probable victoria del PP, ¿qué planteará IU desde la oposición y con quiénes será aliado?

–Plantearemos inmediatamente las medidas centrales de nuestro programa: un plan de creación de empleo y de protección a los desempleados, un conjunto de medidas para apoyar a las pequeñas empresas, la anulación de la reforma laboral impuesta por el gobierno, y la reforma de la Ley Electoral. Nosotros vamos a analizar toda nuestra política de alianzas en función de las coincidencias programáticas. Ese es el criterio fundamental.

–¿Cuál es la relación de ustedes con el 15-M? ¿Los representan?

–Muchos afiliados de Izquierda Unida son activistas en el 15-M. Incluso algunos de nuestros candidatos participan en el movimiento. Una parte muy significativa de las reivindicaciones de los indignados son propuestas por las que IU lucha desde hace tiempo. Pero eso no quiere decir que nosotros los representemos, respetamos la autonomía del movimiento y es a ellos a quienes corresponde decir en qué se sienten representados y en qué no. Es muy importante que el movimiento se consolide en el futuro porque ha logrado la politización de amplios sectores sociales con un enfoque claramente antineoliberal.

–¿Cuál es el futuro del Estado de Bienestar en España?

–Desde que el gobierno socialista tomó la decisión de recortar derechos sociales y laborales en mayo del pasado año, el Estado de Bienestar en nuestro país ha sufrido un gran retroceso. Su futuro, si ganase el PP, sería también bastante oscuro, ya que la política del PP, tal y como puede comprobarse en las comunidades donde gobierna, es seguir por esa senda de recortes y sacrificar derechos que a los ciudadanos nos ha costado tanto conquistar. En ese sentido, y ante esta perspectiva, IU será un dique de contención y hará frente a cualquier política de recortes que se plantee en el Parlamento, la haga quien la haga. No podemos permitir que los trabajadores sigan pagando una crisis que, además, ellos no han provocado.

–Un siete por ciento del electorado del PSOE votaría por IU según los sondeos. ¿A qué se lo atribuye?

–Se ha producido una gran decepción entre muchos votantes socialistas porque se les pidió el voto para un programa socialdemócrata y para frenar a la derecha y el PSOE ha aplicado políticas neoliberales y ha puesto la alfombra para un triunfo muy amplio de la derecha. Una parte de ese electorado decepcionado piensa que la mejor forma de resistir el ataque a los derechos conquistados con tanta lucha y a la destrucción del muy modesto Estado del Bienestar que hay en España es votar a IU.

–Con la llegada de un gobierno del PP, ¿qué cree que pasará con derechos adquiridos como el matrimonio igualitario, el aborto, etcétera? ¿Qué hará IU al respecto?

–Todos esos derechos y otros de gran importancia como la negociación colectiva de las condiciones de trabajo, las pensiones dignas o la atención a las personas dependientes, la escuela y la sanidad públicas, de calidad y universales están en grave riesgo. Nosotros nos opondremos en la calle y en el Parlamento.