La CIA dice que está tratando de matarlo, así como a sus colaboradores (ver nota pág. 5). La guerra había comenzado hace 11 días con un bombardeo imprevisto en el lugar donde estaba reunido él con su plana mayor. Hasta se rumoreó que lo habían matado.
Pero los días pasan y Saddam Hussein sigue haciendo apariciones en la televisión iraquí. Ayer se lo vio presidiendo una reunión de ministros y colaboradores: entre ellos, el vicepresidente Taha Yassin Ramadán, el vicepremier Tarek Aziz y el hijo menor de Saddam, Qusai, que lidera las unidades de fedayines y la Guardia Republicana, los incondicionales del régimen. Los participantes, según afirmó el presentador de la televisión, expresaron “plena confianza” en la victoria sobre los "invasores" norteamericanos y británicos.
No hubo forma de identificar si esto fue grabado o no. A Saddam se lo veía serio, muy abrigado, en la mayoría de los casos escuchando las opiniones de sus asesores.