“Son amigos nuestros. Punto final”, dijo Bush, mientras que el presidente español José María Aznar sentenció que “en mi caso, además de amigos, son mi familia”. Con estas declaraciones, Bush negó que su país vaya a tomar represalias contra Chile y México por no haber apoyado la invasión a Irak. En el Consejo de Seguridad de la ONU, estos dos países anunciaron que votarían en contra de la resolución que Washington promovía para legitimar el ataque. “Tenemos excelentes relaciones con México y seguiremos teniéndolas”, dijo Bush en la conferencia de prensa conjunta que dio ayer en la Casa Blanca junto a Aznar. También anunció que el Tratado de Libre Comercio con Chile recibirá un nuevo empujón para su aprobación final en el Congreso norteamericano.